Avenida Xoborg y Marín Peixegalego se jugaban el segundo puesto de la tabla y, con ello, la posibilidad de acceder al play off. El equipo gallego partía con ventaja, ya que podía permitirse una derrota por hasta cuatro puntos de diferencia para lograr la ansiada posición. 

El encuentro arrancó con un ritmo vertiginoso, en el que Marín Peixegalego tomó la delantera en el marcador. Tras varias posesiones precipitadas por parte de Xoborg, Borja San Miguel solicitó un tiempo muerto para reclamar orden. A partir de ahí, emergió la figura de Akinwole, primero con una asistencia y luego con un triple que firmó un parcial de 6-0, igualando el marcador a 16.

Xoborg logró contener las acciones de Leveque bajo el aro gracias a buenas ayudas defensivas, e Isnord amplió la ventaja local con el tercer triple consecutivo. Así se llegó al final del primer cuarto con un 21-18 favorable a los salmantinos.

El segundo cuarto trajo consigo el acierto de Reilly desde la línea de tres, lo que cambió la dinámica del marcador. Los locales, sin fortuna desde el perímetro, veían cómo su rival les superaba en acierto exterior. Cuando Avenida Xoborg buscaba jugadas más elaboradas y evitaba el triple precipitado, encontraba mejores opciones, pero Peixegalego se mantenía firme gracias a su fortaleza interior, logrando una renta de hasta seis puntos. Sin embargo, un triple estratosférico de Akinwole desde más allá del medio campo sobre la bocina ajustó el marcador al descanso: 33-35.

El tercer cuarto comenzó con un nuevo toque de atención de Borja San Miguel, ya que sus jugadores salieron desconectados en defensa y cedieron cuatro puntos fáciles. Fue un cuarto de idas y venidas, con parciales para ambos equipos, aunque siempre con Marín Peixegalego por delante, apoyado en el acierto de Van Wijk y Reilly, además de la potencia física de Leveque. Akinwole y Hetor Mensah sostenían al equipo local, que seguía desacertado desde el triple. Al final del tercer cuarto, el marcador reflejaba un 49-56 para los visitantes.

La situación se complicaba: a los siete puntos de desventaja se sumaban los cinco que Avenida Xoborg necesitaba para cumplir con el objetivo. La presión se hacía notar, y el equipo gallego, más seguro de sí mismo, aprovechaba la situación. La diferencia llegó a superar los diez puntos, y la lesión de McCarthy enfrió aún más el ambiente. Aun así, con tres minutos por delante, el equipo salmantino no se rindió. Un parcial de 5-0 redujo la desventaja de -13 a -6, lo que forzó un tiempo muerto visitante.

Era el todo o nada. Avenida Xoborg tuvo varias oportunidades para recortar más e incluso forzar la prórroga, pero los últimos lanzamientos no entraron, y el sueño del play off se alejaba de manera virtual porque restan dos partidos y todo depende de una carambola.