Aseguran que cuando estuvieron en el monasterio de Derio vivieron una serie de fenómenos extraños, que enfermaron y surgieron disputas entre ellas
La Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de la Junta de Castilla y León no renunciará a relajar las medidas de saneamiento ganadero, como el control de la tuberculosis bovina, y ha fiado a poder flexibilizarlas en el futuro cuando "un nuevo Gobierno" tras el 23 de julio lo vea "con otros ojos".
Así lo ha avanzado este miércoles en una rueda de prensa el consejero de este departamento, Gerardo Dueñas (Vox), que ha expresado que, en este asunto, se ha "llevado muy al extremo la salud pública": "No podemos matar a todas las vacas para controlar la tuberculosis", ha argumentado.
"No podemos decir que no existe riesgo de zoonosis, porque sí lo hay, pero no podemos llevar al extremo algo que, hoy por hoy, es muy bajo", ha insistido el consejero.
Sobre la polémica y el choque jurídico entre Junta y Gobierno en estos días a raíz de la publicación de la disposición que relajaba el saneamiento en la Comunidad y la respuesta que dio del Ministerio con la orden que inmovilizaba el ganado, Dueñas ha subrayado que el Ejecutivo autonómico nunca ha actuado a sabiendas de que se estaba incumpliendo la ley.
En este sentido, aunque Dueñas ha reconocido que desde el Ministerio sí que les trasladaron sus dudas sobre la medida que posteriormente publicaron, ellos decidieron continuar con ella porque entendían que las observaciones que presentaron tanto el Gobierno como los técnicos de Sanidad autonómicos se correspondían "más con asuntos técnicos que con legales".
Después de que el ganado de la Comunidad haya estado diez días inmovilizado, el consejero ha avanzado que esta situación no se puede volver a repetir y ha indicado que su departamento trabaja ya en una guía de funcionamiento y una nueva orden autonómica que adapte los programas nacionales de saneamiento animal de 2020.
Será esta una nueva orden que Dueñas espera que esté lista "en unos meses" y no renunciará a "flexibilizar" estos controles de la tuberculosis, como también demandan, ha indicado, otros países y territorios nacionales.
En este sentido, el titular de Agricultura ha explicado que el Gobierno de España sí tendría competencias para establecer un "programa de mínimos y no de máximos, como ahora" esta normativa de control sanitario de la cabaña, aunque ha reconocido que este cambio de postura solo se podría llevar a cabo con "un cambio de Gobierno" en España.
Preguntado por si ha valorado dimitir, como han pedido el colectivo veterinario en la Comunidad, el consejero ha indicado que no ha contemplado tal extremo y ha subrayado que él "sigue pensando que la resolución de la Comunidad es legal" y que la orden del Ministerio "va en contra del sector".
"El Ministerio ejerció su derecho al contencioso-administrativo y aplicó un 155. Ellos sabrán por qué lo hicieron, porque no se ponía en peligro nada", ha expresado Dueñas sobre esa orden del ministerio que impidió a las vacas de Castilla y León abandonar la Comunidad.
Es por ello que Dueñas ha indicado que la Junta continuará adelante con el contencioso-administrativo para que sea la justicia la que, una vez analizado con detenimiento las dos posturas enfrentadas, decida quién tiene la razón.
Pese a ello, Dueñas ha destacado que la Junta lo que no hará es "saltarse la ley para que el sector sobreviva", sino que buscarán, por todos los medios, la "modificación normativa".
Finalmente, sobre los costes que esta disputa jurídica ha podido tener en el sector, Dueñas ha asegurado que estos "no se acercan ni por asomo" a los 3,8 millones de euros, como han valorado algunos colectivos.
Por su parte, el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha anunciado que mañana el Boletín Oficial del Estado (BOE) publicará una nueva orden firmada por él que deja sin efecto la anterior, que vio la luz el 29 de mayo, y que supuso la restricción en el movimiento de ganado, tras flexibilizar la Junta de Castilla y León las medidas de control y erradicación de la tuberculosis bovina.
Aseguran que cuando estuvieron en el monasterio de Derio vivieron una serie de fenómenos extraños, que enfermaron y surgieron disputas entre ellas
Formaban parte de un grupo criminal dedicado a la sustracción de estos perros y tenían su centro de operaciones en el Barrio de Buenos Aires de Salamanca capital
Para la rehabilitación de niños con patologías neuromotoras, como la parálisis o el daño cerebral
Los hechos se produjeron el pasado 27 de noviembre en el municipio de El Bohodón