El Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Salamanca exige la dimisión o el cese "inmediato" de los concejales de Turismo, Fernando Castaño, y de Promoción Económica, Juan José Sánchez, y la convocatoria urgente de una comisión de investigación que aclare todo lo sucedido en torno al congreso Peace City World.

Recordemos que el Consistorio anunciaba esta mañana la rescisión inmediata del contrato con el asesor de proyectos estratégicos tras constatar que su título de Economía es "falso" y la ruptura del protocolo firmado con la organización Peace City World. Tras esta decisión llegaron las primeras críticas desde Podemos y, posteriormente, desde las filas socialistas.

Su portavoz, José Luis Mateos, no se ha ahorrado calificativos. Lo sucedido es "extremadamente grave" y deja la imagen de Salamanca "por los suelos". La ciudad se ha convertido en el "hazmerreir" nacional y los responsables municipales deberían tomar decisiones "inmediatamente". 

La primera, convocar "ya" una comisión de investigación que aclare por qué se fichó a una persona "con documentación falsa". Según Mateos "lo mínimo antes es comprobar si era información veraz, y no se hizo". La citada comisión, a su juicio, también tendría que investigar "todos los gastos" de la Sociedad de Turismo durante 2022 y lo que llevamos de 2023.

La segunda decisión, tan urgente como la primera para los socialistas, es la "asunción de responsabilidades políticas", ya sea la dimisión o el cese de los ediles de Turismo y Promoción Económica, ambos de Cs. "Si no dimiten, que les cesen inmediatamente. Ya está bien de ensuciar el nombre de Salamanca".

Y la tercera es pelear para "recuperar hasta el último céntimo" pagado al antiguo asesor municipal. Según cálculos socialistas, la cifra rondaría los 200.000 euros (suma de lo abonado durante los tres años que lleva trabajando para el Ayuntamiento y cantidad pública invertida en el congreso Peace City World).

Mateos también exigió al alcalde, Carlos García Carbayo, que tome cartas en el asunto, porque firmó el protocolo "de algo sobre lo que había demasiadas dudas y sospechas". Para los socialistas, es el responsable último de este "hazmerreír" y por eso "no se puede ir de rositas" y debe comparecer para "decir qué va a hacer". 

En resumen, la ciudad necesita "responsables políticos que estén a la altura de los acontecimientos y no sean cómplices, o al menos víctimas, de presuntas estafas, como las que estamos viendo estos días, y que hablemos de proyectos reales con inversiones reales y no proyectos fantasmas enmascarados en la más absoluta indecencia", zanjó.