¿Se imaginan llevar toda la vida dedicada a un oficio y que de repente le digan que no es digno del mismo? Ángel Luis Melo, profesor en el Centro Público Integrado de Formación Profesional Río Tormes de Salamanca, vive una situación abierta a opiniones, pero que se escapa de cualquier lógica. Tras 33 años dedicado a la docencia, 18 de ellos en el citado centro salmantino, 'Melo' como le llaman sus compañeros, forma parte del profesorado de Cuerpo a extinguir de Profesores Técnicos de Formación Profesional por no haber estudiado una titulación universitaria. ¿Cuál es la razón?

Según la Ley Orgánica 3/2020, del 29 de diciembre, por la que se modifica la Ley Orgánica 2/2006; el Gobierno establece como requisito mínimo para ejercer como profesor técnico de formación profesional, la titulación de grado universitario o equivalente a efectos de acceso a la función pública. De esta forma, todos aquellos funcionarios del cuerpo de profesores técnicos de formación profesional que, por no reunir los requisitos de titulación exigidos en la fecha de entrada en vigor de tal ley, no pueden acceder al cuerpo de profesores de enseñanza secundaria. 

Ángel Luis forma parte de la lista definitiva de aspirantes a ocupar un puesto en régimen de interinidad en el Cuerpo de Profesores Técnicos de Formación Profesional, con la especialidad de Equipos Electrónicos. Con este contexto y tras lo mencionado, será excluido de las listas y tampoco podrá presentarse a la listas de selección. Su titulación, Técnico Superior, también la poseen todos aquellos profesores integrados dentro del grupo A2, que sí salvan tales requisitos. Entonces, ¿por qué unos sí y otros no?

Concretamente, dentro del Grupo A2, establecido en el Anexo I del citado Reglamento, están comprendidas diez especialidades, ¿qué ocurre con las 19 restantes? No hay respuesta. 

Su situación no es única, pero Melo ha decidido denunciar su causa a todas las instituciones y autoridades competentes en la materia. "Se lleva a cabo un menoscabo de la calidad de la educación, dado que somos docentes que tenemos gran experiencia en impartir estas especialidades, tarea que hemos realizado durante los últimos años en los centros educativos donde se imparten los Ciclos de formación profesional. Estas especialidades, de hecho, son muy prácticas y dicha capacitación no se adquiere con una titulación universitaria", explica.

La titulación que posee ha servido durante 33 años y que ha aumentado a lo largo de los mismos con la formación pertinente que la docencia requiere, ya no sirve. Por ello, solicita que en el Anexo V del reglamento "se admita su titulación" dentro del Boletín de las Cortes Generales del Senado de 28 de diciembre. 

"Yo ya he cubierto todos los requisitios que se me pedían en su día y con la modificación de la ley en 2006 también los cubrí. ¿Por qué ahora no? Dentro de la ley no aparezco en ningún lado y tengo la misma titulación que los incoporados dentro del grupo A2. Además, no sé en qué condiciones me encuentro, si me van a echar el año que viene, me pongo en huelga mañana mismo", finaliza. 

Y una pregunta viene a la mente, ¿dónde están los sindicatos cuando más se les necesita?