El 'populismo científico', que antepone el 'sentido común' a los hallazgos de la ciencia, es respaldado por menos del 4% de los encuestados en España
La confianza en la ciencia y en los investigadores crece y aumenta también el convencimiento de que muchas de las decisiones políticas deben estar orientadas por las evidencias científicas, pero cada vez se acrecienta más la preocupación ante los populismos que tratan de situar la ciencia como una "casta" y de enfrentar a la gente con una supuesta "élite" académica.
El nuevo fenómeno, conocido como "populismo científico", supone cuestionar el conocimiento y la evidencia científica o la legitimidad de los investigadores, y ha sido alentado por dirigentes políticos como Donald Trump, que ha sugerido que el sentido común o el instinto natural de la gente corriente es superior al "inútil" conocimiento científico, o el argentino Javier Milei, quien cargó contra los "los supuestos científicos e intelectuales, que creen que tener una titulación académica los vuelve seres superiores".
Los argumentos se ponen de manifiesto en un estudio realizado en España por la Fundación Española de Ciencia y Tecnología (FECYT), que se enmarca en el proyecto internacional "Confianza en la ciencia y populismo relacionado con la Ciencia" ("TISP", por sus siglas en inglés), un consorcio de 240 investigadores de todo el mundo que ha analizado esa confianza y ese tipo de populismo en 68 países y que publicaron los resultados globales en la revista Nature Human Behaviour.
El trabajo ha explorado además cuestiones como el consumo de información científica, las percepciones públicas sobre el papel de la ciencia en la política y la sociedad, los beneficios de la ciencia, o sobre las posiciones de la sociedad frente a tecnologías como las vacunas o cuestiones como el cambio climático.
En el ámbito de la ciencia, este "populismo" se define como el antagonismo entre la "gente corriente" y el "sentido común" frente a las élites académicas y los conocimientos científicos, y califica así a quienes cuestionan la autoridad de los investigadores o las afirmaciones y las evidencias científicas.
Los resultados revelan que en España sólo el 3,6 por ciento de la población encuestada (un millar de personas) se encuentra en los valores máximos en una "escala" de populismo, mientras que el 71,4 por ciento se sitúa en la mitad inferior de esa escala y el 25 por ciento estaría en un punto intermedio.
Según la encuesta, los canales a través de los que se recibe información científica más frecuente son los programas de noticias o documentales de televisión o radio, artículos en sitios web o aplicaciones de noticias y redes sociales (como Facebook, Instagram, Tik Tok o YouTube), y los actores más valorados para comunicar los avances científicos y tecnológicos son las universidades y los centros públicos de investigación.
Entre los encuestados el respaldo a la inversión en investigación es mayoritario; la mitad opina que la investigación le beneficia mucho; y la inmensa mayoría (el 91 por ciento) cree que mejorar la salud pública debería ser prioritario para la ciencia, o que la investigación es la mejor manera de averiguar si algo es verdadero o falso.
El trabajo que revela además que ocho de cada diez personas mantienen que las decisiones de los gobiernos relacionadas con la ciencia deberían depender en gran medida de la orientación de los científicos, pero no se sostiene en la misma medida que los investigadores tengan mucho control sobre las decisiones de los gobiernos en relación con la ciencia.
Las emociones que suscita el cambio climático son de indefensión, pesimismo o enfado, unos sentimientos que aumentan en intensidad entre quienes más confían en los científicos que trabajan en ese ámbito, según este trabajo, que apunta además que la mitad de la población cree que el Gobierno miente sobre la eficacia de sus acciones contra el cambio climático e ignora la angustia de la gente.
Respecto a algunas aplicaciones tecnológicas y el balance entre beneficios y perjuicios, aprueban los aerogeneradores, pero suspenden la energía nuclear, la experimentación animal con fines médicos o la robotización en el trabajo.
Sí expresan los encuestados una confianza muy alta en la eficacia de las vacunas y su importancia para proteger la salud, aunque se detecta una actitud más crítica respecto a las vacunas infantiles, ya que los resultados revelan que la mitad de la población piensa que los niños reciben demasiadas.
La investigadora de la Universidad Complutense de Madrid y co-directora científica del estudio, Celia Díaz, ha explicado en un encuentro con periodistas que los resultados muestran que las comunidades científicas tienen dos retos importantes: "por un lado, favorecer la apertura del personal científico para recibir retroalimentación y opiniones de otros públicos, y por otro, facilitar la información científica en actividades y medios de uso más cotidiano para el público general".
El 'populismo científico', que antepone el 'sentido común' a los hallazgos de la ciencia, es respaldado por menos del 4% de los encuestados en España
En 1974, en Budapest, se ideó el primer prototipo 3x3, cuyo récord de resolución está establecido en poco más de 3 segundos
La Casa Real ha distribuido las primeras imágenes en la que se ver a la heredera realizando diferentes ejercicios, como la subida a palos
El sorteo ha deparado que Daniela Blasco sea la que abra la final y Melody la cerrara en la que será la cuenta atrás para elegir al representante en Eurovisión