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La sorprendente cifra de muertes por calor o frío que se produjo en Salamanca en 2024

El calor excesivo puede alterar las funciones vitales y las bajas temperaturas un estrés térmico que provoca un colapso circulatorio

La sorprendente cifra de muertes por calor o frío que se produjo en Salamanca en 2024
Calor en Salamanca (Foto: Arai Santana)
Teresa Sánchez
Teresa Sánchez
Lectura estimada: 2 min.

Las muertes por causas atribuibles a las temperaturas, ya sean por intenso calor o por el frío, descendieron un 55 por ciento en Castilla y León al pasar de las 813 registradas en 2023 por el MoMo, el Sistema de Monitorización de la Mortalidad Diaria, a las 373 anotadas al término de 2024.

Según este censo, gestionado por el Centro Nacional de Epidemiología del Instituto de Salud Carlos III, Salamanca -con 131 frente a 446 en 2023- se situó a la cabeza de la Comunidad.

Por detrás se situaron las provincias de Valladolid (50 vs 71); Burgos (42 vs 35); Palencia (41 vs 36); Segovia (38 vs 28); Ávila (28 vs 32); Zamora (16 vs 17); León (14 vs 118); y Soria (12 vs 29).

La herramienta MoMo fue desarrollada en 2004, en el marco del 'Plan de acciones preventivas contra los efectos de las temperaturas excesivas (Plan Calor)', coordinado por el Ministerio de Sanidad, para reducir el impacto sobre la salud de la población como consecuencia del exceso de temperatura.

En este sentido, el objetivo de MoMo es identificar las desviaciones de mortalidad diaria observada con respecto a la esperada según las series históricas de mortalidad. En Castilla y León, el año pasado, se notificaron 29.264 decesos, con un exceso de fallecimientos de 779. Cerca de la mitad por las temperaturas.

Esas muertes que el MoMo vincula con el tiempo se concentran en cuatro meses: enero, con 55 fallecidos; julio, con un total de 83 decesos; agosto, el mes que más muertes anotó por defunciones atribuibles, en este caso, al exceso de temperaturas (141); y el pasado mes de diciembre, donde el MoMo estima que 58 personas pudieron perder la vida esta vez, a consecuencia del frío con termómetros muchos días bajo cero.

Hay que echar la vista atrás, a 2020, en plena pandemia de la covid para encontrar periodos en los que la Comunidad anotó más muertes de las que se observan habitualmente. Marzo de 2020 registró un exceso de mortalidad de más de 1.850 personas, ninguna atribuible a temperaturas. Abril de ese mismo año registró otras 2.792, tan sólo tres atribuibles a temperaturas.

El calor excesivo puede alterar las funciones vitales si el cuerpo humano no es capaz de compensar las variaciones de la temperatura corporal. Y es que provoca pérdida de agua y electrolitos esenciales para el correcto funcionamiento de algunos órganos.

Por su parte, los decesos provocados por las bajas temperaturas se producen debido a que el estrés térmico provoca un colapso circulatorio al reducir el suministro de sangre a la piel para protegerse del frío y aumentar la presión arterial de los órganos internos.