La madre y la hermana de la víctima han agradecido el apoyo recibido durante estos días y han recalcado que su objetivo era que este hecho "no quedara impune"
Un pisotón que fracturó el cráneo y sumersión en el agua: revelan la causa de muerte de la mujer asesinada en Santa Marta
Los forenses determinan mediante la huella de una zapatilla en la cabeza que la mujer recibió un pisotón "ejercido con fuerza" y "que no pudo defenderse"
El acusado llegando a la Audiencia Provincial (Fotos: Arai Santana)
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La Audiencia Provincial de Salamanca juzga esta semana el crimen por la muerte de Yeis María, una mujer que perdió la vida tras ser golpeada y ahogada en la bañera a manos del único detenido por los hechos, vecino de Santa Marta, D. G. M, que se enfrenta a 25 años de prisión por un delito de asesinato con los agravantes de alevosía y ensañamiento.
Este martes y tras la declaración de los testigos, se encara la segunda sesión de este juicio, en esta ocasión, han pasado por la sala para deponer los forenses. Peritos que acudieron al levantamiento del cadáver han determinado como murió la víctima a manos de su agresor.
"La encontramos en el suelo del baño, con muchos golpes en cabeza y en la parte superior de tronco, hematomas en extremidades superiores y la mandíbula deforme. Lo más llamativo estaba en la cabeza. El lado izquierdo de su cara mostraba una huella de calzado que reproduce la forma de la suela de una zapatilla que estaba en el lugar de los hechos".
La familia de la víctima a las puertas de la Audiencia Provincial (Foto: Arai Santana)
"Ese pisotón le causó la fractura del cráneo mientras la mujer estaba en el suelo y él ejerciendo presión con su cuerpo con gran violencia. Una lesión que sería mortal". Aclaran que la mujer "no pudo defenderse".
La causa final del fallecimiento fue "la sumersión en el agua". "Yeis estaba viva pero agonizante cuando la sumergió en el agua, estaba luchando por su vida, las vías respiratorias estaban inundadas".
También se ha hablado del salón dónde ocurrieron los hechos, lugar en el que D. G. M. habría acabado con la vida de Yeis. "El sofá, el mueble y la pared estaban llenos de gotas de sangre". Además, aclaran que la mujer había consumido drogas y alcohol.
Sobre el estado mental del supuesto agresor, "esta persona es capaz de planificar lo ocurrido. Su manera de razonar cuando estuvimos con él era normal, era capaz de pensar a pesar de haber consumido. De hecho, después del acto criminal limpió".
LA GUARDIA CIVIL
Posteriormente ha sido el turno para los agentes de la Guardia Civil que llegaron al lugar de los hechos después de lo ocurrido. Una vez allí, estaban presentes los servicios médicos, "nos entrevistamos con el acusado, nos dijo que la víctima se trataba de una prostituta con la que había mantenido relaciones. Después, consumieron alcohol y drogas y se fue al baño. Al volver, expresó que se había golpeado sola, que la encontró inconsciente... fue lo que nos dijo".
Según el relato del acusado a la Guadia Civil, "se asustó y se la llevó al baño para reanimarla con agua. Procedió a limpiar el pasillo y parte del salón. Nunca reconoció haber pegado a la mujer". Encontraron salpicaduras de sangre por varias zonas de la casa que han sido expuestas en diversas fotografías.
"La víctima estaba entre la mesa y el sofá en las imágenes que el supuesto agresor envió a sus amigos. Hay hasta dos metros de distancia entre las salpicaduras de sangre y la zona donde estaba la mujer fallecida", lo que deja ver la fuerza ejercida a la hora de asestar los golpes.
"Tenía cinta americana alrededor del cuello, probablemente, para amordazarla, lo creemos así por el testimonio de las vecinas que después de escucharla una vez llamándolo 'hijo de puta', 'basta ya'... no volvieron a escuchar nada".
"Esa cinta americana además de cinta de carrocero también se utilizó para maniatarla a una mesa. Encontraron una mancha de sangre en el teléfono de la víctima que concuerda con el análisis de las llamadas que realizó el acusado para intentar localizar el teléfono en la propia casa. Estaba eludiendo la responsabilidad".
"Había guardado la sudadera y la camiseta que llevó puestas en una caja de cartón, había en ellas restos de sangre. Y puso música que es donde creemos que está limpiando la casa gracias a los testimonios de las vecinas". "Nos llamó la atención que tenía sangre en el pantalón y en la mano derecha que no paraba de tocársela".
LA HUELLA DE LA CARA
"Encontraron unos zuecos que eran compatibles con la huella que quedó 'tatuada' en la cara de Yeis María ya fallecida. No se determinó si fue el pie izquierdo o el derecho porque las huellas eran exactamente iguales".
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