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Juzbado demuestra de nuevo su vocación de acogida con el quinto encuentro con refugiados de hasta ocho países

Jornada de convivencia entre los vecinos y 60 personas procedentes de lugares como Senegal, Gambia, Venezuela, Colombia, Perú, Ecuador, El Salvador y Honduras

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Juzbado demuestra de nuevo su vocación de acogida con el quinto encuentro con refugiados de hasta ocho países
Teresa Sánchez
Teresa Sánchez
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El pueblo salmantino de Juzbado celebró el pasado 20 de julio una jornada en la que recibió durante unas horas a 60 personas procedentes de varios países acogidas a la protección internacional. Se trata de un intercambio cultural realizado gracias a la ONG Accem, la Asociación de Mayores deJuzbado y los vecinos y vecinas de Juzbado. Las familias que visitaron la localidad en esta quinta celebración del programa 'Juzbado Acoge', proceden de países como Senegal, Gambia, Venezuela, Colombia, Perú, Ecuador, El Salvador y Honduras.

La jornada consistió en una bienvenida por parte de Fernando Rubio, alcalde de Juzbado y rodeado de parte del equipo consistorial así como de numerosos vecinos. Rubio afirmó que "el mundo rural está lleno de oportunidades para nuevos pobladores" y que "Juzbado es un pueblo de acogida".

A continuación, el numeroso grupo recorrió las calles y lugares más emblemáticos de Juzbado, deteniéndose en los miradores de la Peña del Castillo, el Museo del a Falla o el Centro botánico, para terminar en el salón de actos. Allí se ofreció una paella a todos los asistentes elaborada por el Chef Nano y coordinada por Faustino Iglesias, Tino, presidente de la Asociación de Mayores.

Este último reconoció públicamente la "satisfacción que genera esta acogida que cumple ya un lustro". A lo que añadió "la generosidad mutua que los vecinos de Juzbado y los visitantes demuestran cada año es para emocionarse". Durante la comida se degustaron, además de la riquísima paella, elaboraciones dulces y saladas de las propias familias participantes. Un momento especial en el que se sucedieron conversaciones de mucho interés en torno a una mesa llena de exóticos platos y que, sin duda, enriquecieron y deleitaron la experiencia de todos los asistentes.

Tras la comida se celebró el tradicional micro abierto gracias al cuál fueron muchas las voces intervinientes. Vecinos y visitantes intercambiaron palabras de agradecimiento, canciones, poemas y bailes. Pilar Recio, vecina de Juzbado, presentó un poema inédito para la ocasión titulado 'Tierras lejanas'. La jornada de convivencia multicultural finalizó con un chapuzón en las piscinas municipales.

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