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La verdad y la realidad

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La verdad y la realidad
Diego Jalón Barroso
Diego Jalón Barroso
Lectura estimada: 4 min.
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Ya sabíamos de la obsesión de Sánchez por dividir España en dos bloques, a un lado y otro del muro, entre progresistas y "la derecha y la ultraderecha". Pero esta semana parece haber ir ido un paso más allá, y quiere también separarnos entre platónicos y aristotélicos, entre aficionados a la epistemología yfans de la ontología. Porque, aunque pueda parecer increíble, Sánchez ha propuesto un nuevo "axioma", es decir una proposición tan clara y evidente que debe ser admitida sin demostración, no sobre política o sobre economía, sino sobre la verdad, asunto en el que sin duda es una autoridad.  

Ya sé que escuchar a Sánchez disertar sobre la verdad puede provocar cierto alipori, casi el mismo que contemplarlo irrumpir en el mundo de la filosofía como un elefante en un súper chino, dándose de cabezazos con Baruch, Spinoza y todo el racionalismo. Pero dice el presidente que "hay un axioma que yo me aplico mucho en la política, como también en la vida: la verdad de las cosas es la realidad".

En esto de la filosofía, como en lo de la economía, en la que por cierto es doctor, Sánchez toca de oído, pero desafina. Lo que dice Aristóteles no es que la verdad sea la realidad, sino que la verdad y la falsedad tienen lugar en los enunciados y no en los entes. Para decirlo con palabras que hasta Sánchez pueda entender, para el fundador del Liceo, decir la verdad es decir lo que se corresponde con la realidad y mentir es decir lo que no se corresponde con ella. O sea que decir que "el PSOE ha pactado con Bildu la entrega de la alcaldía de Pamplona" se corresponde con la realidad y por lo tanto es verdad. Y decir que "el PSOE no ha pactado nada con Bildu" es mentira, porque no responde a la realidad.

De estas y otras cosas hablaba el presidente en una entrevista que el diario oficial publicó el pasado domingo y en la que los entrevistadores, nada menos que su directora, Pepa Bueno, y el veterano periodista Carlos E. Cué, se esforzaron, preguntando y repreguntando, en tratar de conseguir que Sánchez explicasequé competencias estatales en materia de inmigración son las que ha aceptado delegar a Cataluña a cambio de la abstención de Junts el día de los omnibuses. Pero no hubo manera, por mucho que insistieron.

Leyendo la entrevista uno se acaba quedando con la impresión de que realmente, en verdad, ni siquiera Sánchez sabe qué es lo que ha aceptado delegar a Cataluña. Le dicen los periodistas que no está claro lo pactado, que no hay transparencia. A lo que Sánchez replica que sí, que el acuerdo es transparente y conocido porque "están ustedes opinando de él. Si uno lee el párrafo del acuerdo es bastante evidente lo que estamos diciendo".

El presidente nos dice que leamos el párrafo del acuerdo. ¿Pero de qué acuerdo? ¿Hay un documento firmado entre el PSOE y Junts en el que se recojan los términos de este acuerdo? Porque hasta ahora el único papel publicado es el difundido por Junts, que es una nota de prensa, pero nada más. Nadie ha podido de momento ver ese documento, salvo precisamente el citado diario, que ha tenido acceso a un solo párrafo, qué casualidad, justo aquel al que se refería días antes el presidente: "Se acuerda una ley orgánica de delegación de competencias y recursos para que Catalunya pueda hacer una gestión integral de la inmigración conforme al artículo 150.2 de la Constitución".

No explican en El País por qué han tenido acceso, ellos y solo ellos, a un párrafo y no al resto del documento, pero eso son cosas de la trasparencia de la que tanto presume este Gobierno. Y el redactado del párrafo tampoco aclara mucho, seguramente porque como dice Patxi López, "la negociación fue de urgencia y el papel se redactó de aquella manera", toda una metáfora de la forma de hacer las cosas de este Gobierno.

Pero volviendo a la entrevista, ¿Cataluña va a poder expulsar inmigrantes? No, responde Sánchez, eso compete a la administración central porque lo dice esa Constitución que hasta el 23 de julio prohibía la amnistía. Igual por eso es por lo que hablan María Jesús Montero y Pilar Alegría de que hay quehacer una ley orgánica que contemple esa delegación de competencias. Pero ¿qué se delegaría? Pues lo que está recogido en el Estatut, dice Sánchez.

El de Cataluña es un estatuto que lleva en vigor 15 años y parece que lo que pide Junts no es que se traspasen competencias pendientes, sino que se deleguen competencias que hoy son estatales. Por eso lo de la ley orgánica. ¿O no? ¿Cuál es la verdad? ¿Y cuál la realidad? Igual escuchando al hombre de confianza de Sánchez en Cataluña, Salvador Illa, podemos aclarar algo de todo este formidable embrollo.

"¿Competencias para qué?", se pregunta Illa. "Me parece que Junts per Cataluña, la derecha catalana, está cometiendo el mismo error que ha cometido la derecha española, el Partido Popular, que es dejarse marcar la agenda por la ultraderecha", señala el exministro, que efectivamente nos aclara algunas cosas. Para empezar que Junts es la derecha. Y además, una derecha que se deja arrastrar por la ultraderecha. Lo que ya sería fantástico es que Illa nos explicase no sólo lo que piensa de Junts, sino qué le parece lo que ha hecho el PSOE, partido en el que milita, al firmar este acuerdo de inmigración con Junts.

Porque en pura lógica aristotélica, esa que tanto le mola ahora al presidente, si convenimos en que, como dice Santos Cerdán,el PSOE tiene firmado con Junts un pacto de legislatura, y Juntses la derecha catalana que se dejar marcar la agenda por la ultraderecha catalana, tendremos que aceptar que el PSOE ha pactado la gobernabilidad de España con la derecha catalana, secuestrada por la ultraderecha catalana.

Esta es la realidad y por lo tanto, como dice Sánchez "la verdad de las cosas". Y tan verdad y tan real es que Sánchez perdió las elecciones con Feijóo, como que ha logrado formar una mayoría parlamentaria que legitima su Gobierno. Pero un poco más discutible es eso que dice en la entrevista de que los de Junts "hoy no están discutiendo la independencia, sino cuál va a ser el IVA del aceite". ¿De verdad y en realidad se lo cree? Porque hace un par de días le dijo Turull lo de que "si no hay referéndum, pues colorín colorado", y no parecía muy preocupado por el IVA del aceite.

Es posible que a Turull se le haya calentado la boca, hay precedentes, pero si lo que dice Sánchez es verdad, estaría bien que nos explicase para qué hay que irse a Suiza a negociar con Puigdemont el IVA del aceite, si ya lo han bajado al 0%. No creo que lo haga. Así es el presidente que "ha incorporado a la gobernabilidad" a Junts, a ERC y a Bildu. El único político capaz de afirmar en el mismo párrafo de una entrevista que su gestión "ha mejorado la convivencia" y que "estamos viviendo un pico de polarización sin precedentes". Lo peor es que esa es nuestra verdad y nuestra realidad.

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2 Comentarios

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usuario anonimo 1/19/2024 - 9:19:18 AM
Muy buen comentario sobre las últimas mentiras de Pinocho Sánchez
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usuario anonimo 1/19/2024 - 9:18:34 AM
Estupendo artículo totalmente de acuerdo
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