El Ayuntamiento de Boada ha denunciado este sábado la falta de personal, los impagos y el descuido a los usuarios que sufre la residencia de mayores del municipio, de titularidad municipal pero que gestiona una empresa privada.

A través de un comunicado a los medios que recoge la agencia EFE, el Ayuntamiento ha dado a conocer la "grave" situación que atraviesa el centro asistencial, al tiempo que ha pedido el amparo de la Gerencia Territorial de Servicios Sociales y la Junta de Castilla y León para que les ayuden a poner fin la crisis que padecen.

El alcalde de la localidad y la teniente de alcalde han tenido que ocuparse del cuidado de los mayores durante las dos últimas noches ante la ausencia de trabajadores, han indicado en el comunicado.

Según recoge el escrito la residencia de Boada comenzó a tener problemas tras la pandemia de la covid-19, "cuando la empresa gestora, Losada y Cacebone S.L., empezó a incumplir el contrato suscrito tras la apertura de las instalaciones en 2016".

Entre estos incumplimientos, el Ayuntamiento lista el impago del canon pactado, con una deuda acumulada de 45.000 euros; impagos a proveedores, lo que llevó a la residencia a quedarse sin calefacción ni agua caliente; corte de luz por parte de la empresa eléctrica; y falta de mantenimiento básico en las instalaciones.

A ello se suma, según la denuncia municipal, riesgo sanitario por legionela, detectado por inspecciones de la Gerencia Territorial de Servicios Sociales, debido a la falta de mantenimiento del sistema de agua caliente. Y que la propia Gerencia sancionó con 3.001 euros al Consistorio tras detectar deficiencias, como responsable subsidiario.

Ante esta situación, el Ayuntamiento de Boada decidió acudir a la vía administrativa y adjudicar la gestión de la residencia a otra empresa, para evitar el cierre de las instalaciones. Sin embargo, el proceso está paralizado dado que la nueva gestora rechaza las demandas laborales que plantea la actual plantilla.

Sin personal en el turno de noche

La situación se ha vuelto crítica este fin de semana cuando, por una baja imprevista, se ha quedado sin cobertura el turno de noche.

El Ayuntamiento ha explicado que las trabajadoras no han podido asumir el servicio por falta de personal y el propio Consistorio, pese a buscar con urgencia personal cualificado, no ha podido contratarlo al no estar dado de alta en el sector, tal y como indicaron su gestoría y su secretario municipal.

De ahí que el alcalde y la teniente de alcalde decidieran asumir los puestos de trabajo de la residencia durante la noche, acompañados por la hija de uno de los residentes y vecina del pueblo, para "no dejar solos y abandonados" los residentes.

El Ayuntamiento de Boada ha recordado que ha interpuesto numerosas denuncias contra la empresa gestora, y una vez agotadas todas las vías legales, afirman sentirse en una situación de "indefensión total" por parte de las instituciones.

Por ese motivo, han hecho un llamamiento urgente a la Junta de Castilla y León y a la Gerencia Territorial de Servicios Sociales de Salamanca para que intervengan de inmediato y pongan fin a esta crisis sin que tenga que cerrarse la residencia.