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Unas dos mil personas han aplaudido en Madrid este sábado los duros mensajes de los líderes de la extrema derecha europea contra las instituciones de la UE y sus políticas mediombientales y "permisivas" con la inmigración masiva, en un acto plagado de alusiones históricas y referencias a España.
Españoles, pero también portugueses, italianos o húngaros han abarrotado el gran auditorio de un hotel de las afueras de Madrid, entregados a los discursos del presidente de Vox, Santiago Abascal; el primer ministro húngaro, Viktor Orbán; el vicepresidente del Gobierno italiano, Matteo Salvini, y la líder de la ultraderecha francesa, Marine Le Pen, entre otros, en una cita con una gran expectación mediática, con más de 250 periodistas acreditados.
Han participado en la primera cumbre del partido europeo Patriots, tercera fuerza del Parlamento de la UE, por detrás de conservadores y socialistas, a los que han denostado para responsabilizarlos, junto con la Comisión Europea, del "declive" de Europa.
De hecho, algunos de los aplausos más fuertes los han arrancado las críticas al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de las que tampoco se ha librado el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, y a los que se ha llegado a equiparar.
Cientos de banderas, sobre todo de España, pero también de otros países europeos inundaban el salón con pantalla panorámica gigante en el escenario, mientras los oradores animaban a "reconquistar" Europa, defender el cristianismo, la familia "tradicional", solo "dos géneros: hombre y mujer" y la "soberanía e identidad de las naciones" con fronteras "fuertes y seguras".
Y arremetían contra el globalismo y el "multiculturalismo izquierdista", la cultura 'woke' y la inmigración ilegal y descontrolada, particularmente de musulmanes.
El auditorio se puso varias veces en pie, para saludar a Abascal (Vox), Salvini (la Liga) y Orbán (Fidesz), que apoyaron sin reservas al líder ultraderechista español confiados en que será jefe del Ejecutivo próximamente.
También provocaron ovaciones los mensajes en vídeo del presidente de Argentina, el ultraliberal Javier Milei, amigo personal de Abascal, y de la líder opositora venezolana María Corina Machado.
Minutos después de la inauguración irrumpió en el recinto una activista del grupo radical Femen que, con el torso desnudo sobre el que llevaba escrito -en inglés- "Hacer Europa antifascista otra vez", ha gritado "ni un paso atrás" mientras los servicios de seguridad la desalojaban por la fuerza del auditorio.
Se oponía así al lema oficial de la cumbre "Hacer Europa grande otra vez", copiado del "Hacer EE.UU. grande otra vez" del presidente Donald Trump, cuya figura estuvo presente en todos los discursos.
Fue Orbán quien más habló de las relaciones entre su país, Hungría, y España, con lazos históricos e intereses comunes en la Edad Media y también deportivos en el siglo XX, ya que Ferenc Puskas fue futbolista del Real Madrid.
Tuvo también palabras de agradecimiento a España por apoyar a los húngaros en su revolución contra el comunismo en 1956, en plena dictadura franquista.
Evocando la mitología sobre Europa y la tauromaquia, Orbán llegó a decir de Abascal que es "un líder valiente, el torero más valiente que jamás he visto en la política.
"Oye, Santi, vamos a lidiar juntos con este toro enfurecido", concluyó el primer ministro húngaro, convencido de que "es tiempo" de que Vox llegue al Gobierno en España.
Y todo entre vivas a la Europa y la España de los patriotas y gritos de "presidente, presidente" para Abascal, flanqueado en todo momento por Orbán y Le Pen.
El líder de Vox y presidente de Patriots, Santiago Abascal, ha animado este sábado a sus socios de la ultraderecha en el Parlamento Europeo a aprovechar el viento a favor tras la victoria de Donald Trump en Estados Unidos.
El presidente estadounidense ha estado en los discursos de todos los líderes presentes en la cumbre que Patriots ha celebrado este sábado en Madrid.
"El tornado Trump ha cambiado el mundo en solo un par de semanas y se ha acabado una época", "ayer éramos herejes (...) ayer dijeron que éramos el pasado, hoy todos ven que somos el futuro", ha resumido el primer ministro húngaro durante su intervención en la cumbre.
Abascal ha celebrado con sus aliados de Patriots la victoria de Trump, al que ha citado como "compañero de armas en la batalla por el bien y la libertad".
Se ha referido además a una de las primeras medidas que ha anunciado, la imposición de aranceles, para apoyar al mandatario estadounidense y a la par arremeter contra las instituciones europeas.
"Ahora andan levantando la voz con los aranceles que parece que pueden llegar. El gran arancel es el Pacto Verde y los impuestos confiscatorios de Bruselas y de los gobiernos socialistas en toda Europa", ha señalado.
El líder de Vox no ha dejado pasar la oportunidad para hablar de sus adversarios en clave nacional y ha resumido en una frase su intervención: "Sánchez con (Nicolás) Maduro y con Hamás; (Alberto Núñez) Feijóo con Von der Leyen, y nosotros junto a todos vosotros con el futuro de Europa y con el futuro del mundo".
Una crítica jaleada con aplausos por los dos mil asistentes al acto central de la cumbre de Patriots, quienes han celebrado en especial los dardos dirigidos a Sánchez y Feijóo por el líder de Chega, André Ventura.
De Sánchez ha dicho que "está más cerca de ir a la cárcel con todo su Gobierno corrupto", lo que "acerca" a Abascal a la Moncloa y ante la pregunta a gritos de una asistente -"¿Y qué hacemos con Feijóo?"- ha asegurado que son lo mismo, a lo que el auditorio ha reaccionado con un aplauso.
La defensa de las fronteras -"vallas altas hacen buenos vecinos", ha parafraseado Abascal; "Bruselas ha abierto las puertas a los inmigrantes ilegales", ha proclamado Orban; "el pozo sin fondo de la inmigración vacía nuestras arcas y llena nuestras cárceles", ha añadido Le Pen- ha sido una constante en los discursos.
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Este dispositivo fue intervenido durante su detención en octubre en el marco del caso Hidrocarburos.
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