Segundo viaje largo en cinco días con un complicado desplazamiento a Alcantarilla para medirse a un bloque que, centrado en la Liga, puede dar más de un susto
La niebla y el frío ponía en duda la presencia de una numerosa entrada en el estadio Reina Sofía. La visibilidad era escasa a primera hora de la mañana en Salamanca y los cero grados estuvieron presentes en el barrio San José durante el encuentro.
Dos situaciones meteorológicas que llamaban a la prudencia a la hora de pensar en el recuento de aficionados en el Unionistas - Real Sociedad B. Pero como siempre la afición charra respondió y de qué manera.
Un total de 3.570 personas acudieron al estadio salmantino para apoyar a su equipo. El juego no fue el más vistoso, hubo quejas por la no expulsión de Mikel Rodríguez en dos ocasiones y la situación en la que llegó el 0-1, algo que propicio cánticos de 'Siempre nos arbitra un subnormal'. Sin embargo, como hace cada dos semanas, fue la mayor y mejor recompensa para Unionistas. Otra prueba más de que la afición de Unionistas nunca deja a sus jugadores solos ni con niebla y los cero grados presentes en Salamanca.
Al final, fiesta con el 1-1 logrado en el tiempo de descuento y una auténtica alegría para una afición que celebró con sus jugadores un punto que supo a algo más.
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