Nervios de acero y victoria para espantar a los fantasmas en el BM Salamanca

El Balonmano Ciudad de Salamanca logró este sábado una victoria más importante que por los dos puntos. Después de seis tropiezos consecutivos, el cuadro entrenado por Valeria Flores debía ganar tras acabar también con un calendario donde llegaron de golpe todos los nombres fuertes de la liga. Y lo hicieron con un 28-30 fuera de casa, en el pabellón del Camargo y aguantando en una recta final muy apretada.

El de Camargo fue un partido complicado, de fe y lucha hasta el final y que demostró que el Balonmano Salamanca únicamente había caído en los últimos seis partidos porque el calendario estaba siendo complicado e incluso con eso estaba dando la cara. El partido entre cántabros y salmantinos estuvo parejo desde el inicio, sin que ni uno ni otro pudieran romper el marcador y escaparse. 

La máxima diferencia en la primera media hora cayó del lado local con un 13-10, pero esta desapareció y en el descanso el resultado fue de 16-16. Un resultado notable ya que únicamente anotaron seis jugadores charros en todo el encuentro, siendo un golpe en el pecho antes del segundo tiempo.

El BM Salamanca mantuvo el pulso contra el CB Camargo y aprovechó dos exclusiones locales en el segundo tiempo para tomar aire. Agúndez aprovechó la superioridad para anotar el 22-24 en el minuto 46 y dar una ventaja que fue determinante. Todo estuvo apretado hasta el final, pero en el último minuto Alejandro Peña hizo soñar al Camargo con el 28-29 y Sergio Nicolás se encargó de romper cualquier esperanza con el 28-30 a falta de veinte segundos.

Una victoria moral y de mérito para un equipo que vuelve a sonreír mes y medio después, colocándose decimosegundo con ocho puntos.