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Tres colegios de Salamanca solicitan impartir clases de religión islámica este curso

Se trata de los centros León Felipe, Filiberto Villalobos y Rufino Blanco, todos en la capital. El número mínimo de alumnos para que se enseñe la materia es de 10

Tres colegios de Salamanca solicitan impartir clases de religión islámica este curso
Colegio Rufino Blanco de Salamanca.
Daniel Bajo Peña
Daniel Bajo Peña
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Tres colegios de educación infantil y primaria de Salamanca han solicitado a la dirección provincial de educación impartir clases de religión musulmana durante el nuevo curso 2024-2025. Se trata de los CEIP León Felipe, Filiberto Villalobos y Rufino Blanco, todos ubicados en la capital salmantina. 

Los tres colegios cumplen con el requisito legal para pedir la impartición de dicha materia, que es contar con al menos 10 alumnos que la reclamen, dado que los estudiantes tienen este derecho desde hace décadas.

Durante los últimos años varios centros educativos salmantinos han solicitado la enseñanza de la materia, como el Beatriz Galindo o el CRA Alhándiga. Sin embargo, que tengan reconocido el derecho no significa que efectivamente vayan a poder cursar la clase, porque encontrar docentes de religión islámica para Salamanca es buscar una aguja en un pajar.

El proceso también incumbe a la Comisión Islámica de España, la entidad que se encarga de dar la conformidad a los docentes, expedir el certificado de idoneidad y presentar a las autoridades de la Junta el nombre de los profesores acreditados para impartir la materia en los colegios que lo han solicitado.

El problema de fondo para los alumnos de Salamanca es que es muy difícil hallar un profesor. Por una parte, hay pocos -según la web de la Comisión, en enero de 2022 (último dato disponible) había sólo 106 maestros de religión islámica en nuestro país- y, por otra parte, deben estar dispuestos a trasladarse a la provincia o a desplazarse semanalmente desde otra ciudad para tutelar unas pocas horas de docencia. Lo más habitual durante los últimos años es que los estudiantes salmantinos no puedan cursar la materia porque sencillamente no hay nadie que la enseñe.