Unionistas disfruta y sufre con el Reina Sofía

Era el primer partido en casa y Unionistas saltó al campo con ganas de disfrutar con su gente, un ímpetu que también tuvo el Bilbao Athletic. Los dos equipos fueron muy activos, versando su juego en el ataque y haciendo disfrutar a los presentes en un Reina Sofía renovado.

El encuentro empezó sin un claro dominador y con problemas para unos bilbaínos que a los cuatro minutos tuvieron que cambiar a Olabarreita por Bujar. Una lesión temprana que trastocó los planes de Jokin Arambarri. El balón era del filial, pero las ocasiones más claras llegaron desde el bando de casa.

El portero Oier Gastesi tuvo problemas a la hora de jugar en corto, primero con un mal saque que acabó con recuperación de balón de Unionistas dentro del área y un disparo de Pau que se fue fuera y, después, con otro error que no fue a más. A partir de ahí, silbidos al guardameta para tratar de ponerlo nervioso.

Pero el Bilbao Athletic también tuvo sus oportunidades, especialmente con combinaciones rápidas en tres cuartos de campo. El filial rojiblanco tuvo un contraataque que Asier Hierro mandó fuera a los 13 minutos de partido, haciendo daño por la banda izquierda de Eudald Vergés.

Fue por esa zona por la que llegó el 0-1 en el minuto 23. Mientras la grada entonaba el himno de la Unión Deportiva Salamanca, Ibon Sánchez se vistió de mago. El 10 del Bilbao Athletic recibió en la banda derecha, entró hacia dentro dejando atrás a varios defensores y soltando un disparo ante el que nada pudo hacer Iván.

El mazazo fue duro, pero poco a poco Unionistas se despejó y apretó más a un Oier que acabó viendo como los locales empataban y no podía hacer nada. Iván Moreno colgó un gran centro desde la banda derecha y Pau Martínez fue el más listo en ese momento, adelantándose a la defensa y rematando de cabeza de una manera impecable para colocar el 1-1 en el minuto 36.

Con el gol la grada del Reina Sofía se encendió, más aún con una falta que señaló el árbitro cuando el equipo presionaba la salida de balón del Bilbao Athletic. Pero los ánimos no decayeron y el fondo presagió el tanto de su equipo. Tanto que no llegó antes del descanso, llegando el asueto con el 1-1 y un Unionistas volcado en ataque.

La segunda parte comenzó sin cambios y con un ritmo más lento que lo visto antes. Con un partido intenso, pero sin acciones realmente peligrosas, tuvo que ser un saque de esquina el que rompiese el empate.

En el minuto 58 se desató la locura. Pau Martínez colgó un córner desde la banda derecha y encontró a Carlos de la Nava, quien remató y superó a Oier para que la fiesta comenzase oficialmente en la grada. A partir de ahí todo fue rodado para Unionistas e incluso la suerte se puso de su lado.

Eneko Ebro estuvo cerca de empatar de nuevo el partido con un derechazo desde la frontal que se fue al larguero, pero el palo desvió el balón. La suerte apareció y certificó la seguridad que transmitió Unionistas en el segundo tiempo, encarrilando el partido en el minuto 64.

Iván Moreno encaró de nuevo, golpeó el balón y el propio Eneko Ebro la metió en su propia portería en una acción que se convirtió en el 3-1. Locura total en el estadio Reina Sofía, conscientes todos los seguidores de que los tres puntos se iban a sumar al casillero de Unionistas.

El partido no cambió a pesar de los sustos de la recta final. El Bilbao Athletic luchó hasta el final y logró el 3-2 en el 87' con un centro al segundo palo que acabó en el corazón del área pequeña y Ramiro mandó a portería. El susto entró en el cuerpo de Unionistas, pero no fue a más e Iván salvó al equipo para sellar su primera victoria en su primer partido en casa. Cuatro puntos de seis posibles y con grandes sensaciones en el comienzo de la era Dani Llácer.

FOTOS: Arai Santana