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La USAL idea un proyecto para crear una red regional que combata el cambio climático
El consejero de Medio Ambiente reconoce que es una obligación "moral y jurídica" de las administraciones aplicar políticas que preserven "la economía y la salud"
La Junta de Castilla y León mostró este miércoles su compromiso con la Universidad de Salamanca al ahora de impulsar la iniciativa científico tecnológica titulada 'Monitor Cambio Climático-Cambio Global (MCG)', un innovador proyecto que se constituirá como una red de entidad regional, en el contexto nacional y europeo, para identificar investigadores y profesionales especializados desde sus ramas del conocimiento en cambio global, implicando ciencias, ciencias de la salud, ciencias sociales, economía y humanidades, así como quienes se ocupan de aspectos educativos, empresariales, legislativos y de gobernanza.
El consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, reconoció durante su intervención en el acto de presentación del proyecto que es una obligación "moral y jurídica" de las administraciones aplicar políticas que preserven "la economía y la salud" de los ciudadanos en este contexto. En este sentido, el consejero mencionó, en declaraciones recogidas por Ical en las Escuelas Mayores, las medidas necesarias en ámbitos como el reciclaje o las energías renovables, a find de garantizar "la competitividad de la sociedad ante el desafío del cambio global".
Según recordó el consejero, la propia Junta trabaja "desde hace tiempo" en este escenario. "Ya en 2009 teníamos una estratega de cambio climático. Aprobamos la estratega de economía circular, la de mejora de la calidad del aire o la de regeneración urbana. Por tanto, en planificación ya llevamos tiempo. Y en políticas, hemos llevado a cabo muchas actuaciones en materia de electricidad renovable, que Castilla y León es bandera en España, ya que cubrimos todo el consumo propio y aún hay un excedente. Y hemos trabado en redes de calor con biomasa, proyectos de biometano o promovemos y amparamos plantas de hidrógeno", destacó.
En esencia, Suárez-Quiñones reiteró que la Junta de Castilla y León está "en línea" con los objetivos del proyecto impulsado por la Usal, al que están invitadas otras instituciones, como las universidades castellanas y leonesas, y otras de ámbito nacional e internacional, "tanto en actuaciones como en inversiones". Así, enumeró otras actividades, como las repoblaciones forestales, la adecuación del monte o el impulso de la movilidad eléctrica.
"Es un paquete de medidas muy notable, pero tenemos que hacer mucho más. No es suficiente ante este cambio global y es necesario hacer más para buscar la salud, el bienestar de los ciudadanos y una traicionan ecológica justa. Hay mucha información que a veces es difícil de evaluar. Por lo tanto, con todos estos elementos, nos deheso sumado a la propuesta de la Universidad de Salamanca para trabajar en la generación de ese conocimiento con los científicos y, por tanto, revaluar nuestras políticas y determinar las nuevas acciones que tenemos que acometer. Pondremos recursos y medida. para luchar contra ese cambio global. Ahí estaremos con participación económica, organizativa y lo que sea necesario", manifestó el consejero.
Retos trascendentes
Por su parte, el rector de la Universidad de Salamanca, Juan Manuel Corchado, se mostró "convencido" de que el conocimiento que se va a generar con este monitor va a contribuir a mejorar las políticas de las administraciones, incluida la Junta. "El efecto de la actividad humana es palpable en todos los continentes. El vertido de compuestos ligados al desarrollo está determinando cambios tanto a nivel global como local. Y es uno de los retos trascendentales para las futuras agencias e instituciones internacionales", apuntó.
La Universidad de Salamanca, según prosiguió, consciente de esta realidad, ajusta su estrategia medioambiental para adaptarse a estos retos y propone iniciativas novedosas. "Tenemos la aspiración de definir una estructura pionera en nuestra Comunidad. Se propone una red interactiva en la que cada institución o grupo de investigación optimice las tareas relacionadas con el tema que se plantea. En términos concretos, planteamos identificar especialistas que focalicen su actividad en el ámbito del cambio global, fomentar sinergias y generar un foro de discusión- Con esta iniciativa, la Usal se sitúa entre las primeras instituciones en las que se plantea el cambio global con una estrategia común", manifestó el rector.
Modificaciones planetarias
El Programa Internacional para la Biosfera se refiere al cambio global como una de las inquietudes y problemas "sobresalientes" en el contexto social y científico del presente. Un fenómeno que incluye modificaciones a escala planetaria en la atmósfera, océano, ciclos del agua, carbono, nitrógeno, redes tróficas, diversidad biológica, contaminación, salud y, de manera destacada, vinculado en algún caso con los anteriores, clima, y por lo tanto el cambio climático antrópico, según las explicaciones ofrecidas en el acto por el catedrático del Departamento de Geología y miembro del Grupo de Geociencias Oceánicas de la Universidad de Salamanca, José Abel Flores.
Así, en la rueda de prensa, el investigador explicó cómo, "indiscutiblemente, la sociedad humana es la promotora del cambio global", por lo que el término considera "población, economía, uso de recursos, energía, desarrollo social, transporte, comunicaciones, uso y cobertura del suelo, urbanización y gestión de espacios". A partir de una estrategia transversal, los objetivos planteados por MCG son establecer sinergias que contribuyan a la optimización de recursos y al desarrollo de actividades conjuntas, definir líneas estratégicas y asesorar a los agentes sociales, al entramado productivo y a las administraciones.
Cabe destacar, que uno de los objetivos que la red propone es proporcionar información o asesoría a las administraciones y entramado empresarial. Por ello, la iniciativa se plantea como "innovadora, de carácter pluri y multidisciplinar, integradora y con recorrido regional, nacional e internacional". MCG se encargaría de la transmisión de información, siempre en connivencia con instituciones y administración, de los aspectos vinculados o sensibles con el cambio climático y al cambio global. Así, asumiría la labor de ejercer de "nexo" entre instituciones, administración y entramado productivo.
Por otra parte, en el marco de la nueva plataforma científica está previsto el desarrollo de programas y proyectos entre instituciones o grupos con intereses comunes en este tema, así como facilitar tanto información como asesoría para la formulación de proyectos coordinados en todos los ámbitos expuestos, desde los de carácter científico, a los de carácter social o empresarial que lo requieran.
Otra de las líneas de acción destacadas se orienta a la organización de cursos y seminarios de carácter divulgativo y especializados, bien propios del observatorio o ajustados y de forma compartida con aquellos propuestos por las instituciones y entidades implicadas o que lo soliciten. Con especial atención al fomento de cursos de posgrado y formación especializada dentro de las instituciones participantes.
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