El club ha despachado ya más de 1.300 entradas
Rubén Burgos: "Intentaremos llevar el partido a nuestro ritmo. Falta todavía mucho"
El entrenador de Valencia afirma que son dos equipos que "merecen estar en la final" y habla sobre Iagupova
Rubén Burgos realizaba en sala de prensa su valoración del encuentro y de diferentes aspectos relativos a la final.
VALORACIÓN: He tenido la oportunidad de ver la estadística y nuestra defensa en el último cuarto ha sido espectacular. Lo primero que le he dicho a las jugadoras es que esto no es nada, que en el último cuarto estábamos muy igualadas y que intentásemos que Salamanca no se creciera. Han salido muy bien al plan, por eso las he felicitado porque lo han hecho todas. No puede ser de otra manera, somos dos equipos que merecemos estar en la final e intentaremos cambiar cosas, pensar qué puede intentar Avenida en Valencia y llevar el partido a nuestro terreno, a nuestro ritmo. Parte de lo de la pista viene de la ayuda de la afición que se ha desplazado con muchas horas de viaje. Vamos a la Fontenta a juntarnos con más de nuestra gente todavía. Falta todavía mucho.
VUELTA: En el baloncesto actual normalmente el talento se impone a la defensa. Debemos hacerlo muy bien y esperar.
RENDIMIENTO DE PAULA Y MARÍA: Llevan poco tiempo en el equipo. Están demostrando su mejor versión al servicio del equipo para conseguir los objetivos. Es muy positivo que las jóvenes cada vez tengan más presencia en el equipo y en momentos importantes.
IAGUPOVA: Nadie más que ella entiendo que esto va de equipos. Impone su talento, pero al servicio del equipo. Cuando ha de defender, defiende, y cuando tiene que ver sus errores en vídeo lo hace frente a sus compañeras sin ningún problema. Como entrenador es una satisfacción y nos hace parecer mejor a todos.
El torneo se celebró en la localidad vallisoletana de Medina del Campo
"Fue un proceso, con afición, inversión y trabajo. La Copa de 2005 marcó el inicio de todo", señala Recio
El equipo salmantino afronta otra cita con la Copa en un torneo que conquistó por primera vez hace 20 años en tres partidos que fueron un ejercicio de fe