El Colegio Profesional de Fisioterapeutas de Castilla y León (CPFCyL) criticó este martes los proyectos de colaboración entre la Universidad Pontificia de Salamanca (Upsa) y el Hospital Universitario de la capital del Tormes, anunciados ayer, que promueven la prescripción de ejercicio físico para pacientes oncológicos. Según la agrupación, "aunque la promoción de la actividad física aplicada a pacientes como parte del tratamiento es positiva, surge una preocupación significativa de que estos programas no estén liderados por el profesional adecuado: el fisioterapeuta".

En un comunicado remitido a Ical, el CPFCyL señaló que "los fisioterapeutas, con su extensa formación en movimiento humano, anatomía y patologías, son fundamentales en la prescripción y supervisión del ejercicio terapéutico". Dicha formación, añadió, permite adaptar los programas de ejercicio a las necesidades individuales de cada paciente, considerando sus limitaciones y condiciones médicas específicas. La evaluación exhaustiva, la individualización del tratamiento, la prevención de lesiones y la colaboración interdisciplinaria con otros profesionales sanitarios son "aspectos clave" que justifican su "rol esencial" en estos programas.

En respuesta a esta iniciativa, el Colegio Profesional de Fisioterapeutas de Castilla y León expresó su "preocupación". Así, el Colegio defendió el "papel exclusivo" de los fisioterapeutas en la prescripción de ejercicios terapéuticos, "especialmente en casos que involucran pacientes con condiciones médicas complejas como el cáncer". El CPFCyL anunció, de hecho, que tomará medidas legales para proteger la competencia del fisioterapeuta en este ámbito.

El Colegio aclaró que no se opone al programa en sí, pero enfatizó la importancia de que sea dirigido por profesionales sanitarios cualificados, en este caso, los fisioterapeutas. Además, advirtió de que "cualquier problema derivado de la implementación del programa por personal no sanitario recaerá en el sistema público de salud" y que los pacientes y sus familias no están siendo "adecuadamente informados" sobre la cualificación y competencia legal de quienes llevan a cabo su tratamiento.

En conclusión, los fisioterapeutas de Castilla y León afirmaron que "mientras que la iniciativa de integrar el ejercicio físico en el tratamiento de pacientes oncológicos es un paso adelante en el cuidado de la salud, es crucial reconocer y respetar el papel especializado de los fisioterapeutas". Apuntaron, además, que la colaboración entre profesionales sanitarios asegurará que los pacientes reciban un cuidado "seguro, efectivo y adaptado a sus necesidades individuales". "El CPFCyL se mantiene firme en su compromiso de salvaguardar esta competencia profesional por el bienestar de los pacientes, reafirmando que legalmente las personas que tengan condición de pacientes son potestad del personal sanitario", concluyó el comunicado.