Llegó hace un tiempo a Salamanca desde Perú para completar su formación universitaria y desde entonces decidió implicarse en la vida de la ciudad y de la Universidad de Salamanca para contribuir con su nuevo entorno. Martha Gutiérrez estudia un posgrado en la USAL y, además, participa en el programa de voluntariado de Mentoría Inclusiva, puesto en marcha por el Servicio de Asuntos Sociales del Estudio charro.

Se trata de un programa por el que unos estudiantes se convierten en mentores de otros estudiantes, a los que ayudan según sus necesidades. Se trata de personas con algún tipo de discapacidad, con déficit de atención o bajas calificaciones, pero también personas extranjeras que necesitan mejorar el idioma o integrarse en la ciudad a la que acaban de llegar. Una actividad que esta joven considera muy enriquecedora y en la que recibe más de lo que da.

Pero su compromiso con la sociedad salmantina no se queda ahí. También ha sido voluntaria de los Paseos Saludables puestos en marcha por Cruz Roja y acaba de presentar su proyecto al programa de Objetivo Campus Sostenibles, con el que quiere poner en marcha un proyecto para ayudar a otros estudiantes internacionales.

Este 5 de diciembre, Día Internacional del Voluntariado, esta joven peruana cuenta a TRIBUNA su experiencia.

- Es mentora del programa de Mentoría Inclusiva, ¿cómo está siendo esta experiencia?

Es genial porque es un programa muy diverso. Ahora tengo contacto con dos personas, una de ellas es para ayudarle con temas de organización de su agenda, recordarle dos días a la semana qué tareas tiene que realizar, y la otra es una persona que es de Inglaterra y lo único que buscaba era ayuda para mejorar el idioma y conversar sobre su vida, las cosas de Salamanca, pero en español. Me encanta porque es muy diverso y hay ayuda para para quien la solicite en el ámbito que la solicite. Es algo magnífico porque permite contribuir con la sociedad y con todo lo que nos da la universidad. Cuánto me hubiese gustado a mí cuando hice el grado tener este tipo de programas. 

- ¿Por qué se decidió a sumarse a este programa?

Antes de venir a Salamanca hice tutoría universitaria en mi universidad de Perú y era ayudar a estudiantes de bajas calificaciones y me gustó mucho. Sentí mucha retribución, que los chicos a los que yo ayudaba mejoraban en sus calificaciones. Cuando llegué aquí busqué algo parecido. Encontré Mentoría Inclusiva y me pareció genial. 

- Este voluntariado no ha sido su primera experiencia solidaria en Salamanca

Antes de esto había hecho voluntariado en Cruz Roja. Participé en los paseos saludables porque era otra forma de involucrarme más en Salamanca, conocí señores y señoras que eran geniales, me contaban la historia de Salamanca, de sus vidas, y es una forma bonita de contribuir a una ciudad que me ha abierto las puertas y me ha hecho sentir tan bien.

- ¿Qué es lo mejor del voluntariado?

Lo mejor de todos los voluntariados es el contacto con las personas. Yo no siento para nada que sea la salvadora, al revés, ellos me están aportando a mí su confianza y aprendo mucho de ellos, de sus carreras, de su cultura. El contacto con la gente es maravilloso, sentir que tanto te ayudan como tú ayudar un poco en sus vidas, que se entrelazan en tu camino.

- También ha presentado un proyecto al programa de Campus Sostenibles, ¿en qué consiste su iniciativa?

Los estudiantes internacionales de la Beca Santander a veces cuando llegamos nos sentimos solos y desorientados. Mi proyecto pretende crear una guía a partir de la experiencia de estos estudiantes que ya han estado un tiempo aquí, que ya han podido superar sus miedos y la soledad. Como ya hemos aprendido un poco cómo es Salamanca, cómo es la Universidad y hemos superado el choque cultural, la guía busca dar consejos y puntualizar sobre lo que nosotros necesitamos un día y sabemos que cuando venga otro estudiante internacional va a necesitar. Creo que es importante porque podrá ayudar a otras personas.

- ¿Anima a otros estudiantes a participar en voluntariado?

A mí me han motivado a participar y yo animo a todo el mundo a sumarse. Para el proyecto de Campus Sostenibles he buscado a otros estudiantes internacionales que busquen retribuir a la comunidad. Intento fomentar un poco la participación porque es genial el sentir que estás contribuyendo con un granito de arena y es bueno para todos.