Un encuentro de SÍ o SÍ. De responder de forma positiva, afirmativa... todos los sinónimos posibles ante las cuestiones planteadas por un rival que se presentó con cinco atrás y contó con la baja inicial antes incluso de comenzar el encuentro de Pol Llonch, quien fue sustituido por Raúl Dacosta, extremo más ofensivo. Por parte del conjunto local, Slavy se quedó en el banquillo, optando en la zona más alta por Losada y Teijeira de mediapunta, con los extremos para Alfred Planas y Rastrojo. El centro del campo, para la dupla Villar-Nespral, mientras que la línea de cuatro atrás se formó con Ekatiz Jiménez y Carlos en los laterales, y Erik y Ramiro como centrales. Cacharrón volvió a estar en portería. 

Y SÍ jugó Unionistas. El equipo de Dani Ponz acaparó el esférico durante casi la totalidad de los primeros 45 minutos, ante un equipo que no quería la pelota. El conjunto visitante se dedicó a defender y a aprovechar jugadas rápidas, bien frenadas por los charros. Las bandas fueron de menos a más, con especial labor en la salida de balón de Losada y su trabajo de espaldas a portería. Importantes las incorporaciones de Ekatiz, con toque especial en los centros y balones en largo.

Y SÍ hubo ocasiones claras de gol.  El equipo llegó a contar con cuatro córners a lo largo de la primera parte con tres disparos entre los tres palos, en los que tuvo que intervenir el guardameta de la Ponferradina y un remate de cabeza demasiado flojo de Javi Villar tras saque de esquina. 

Fue Rastrojo tras un auténtico carrerón el que ganó a su par en el lateral derecho, para controlar, eso sí, un tanto forzado el esférico, y disparar cruzado, marchándose el balón por línea de fondo. Acto seguido, jugada trabajada con paciencia en torno al área visitante, que terminó con disparo de Losada desde el punto de penalti, demasiado cerrado, despejando Prieto y enviando el balón a córner uno de los tres centrales vestidos de rosa. Se notaba algo más allá de la 'incidencia de gol' tantas veces nombrada por Dani Ponz, el equipo generó de nuevo y pasada la primera media hora de partido, Alfred Planas desde la frontal del área forzó el vuelo de Prieto para evitar el primer tanto en contra. 

Y SÍ defendió Unionistas. Si bien es cierto, se observó una ligera intención de los bercianos de presionar arriba, nada más lejos de la realidad. El equipo local cerro líneas ante cualquier intentona de su contrincante y estuvo atento a las ayudas, con la incorporación cuando era necesario de Nespral y Javi Villar atrás. El capitán charro ayudó a Jiménez en el lateral, mientras que Villar completaba la línea de centrales si así se requería. De igual forma, el desgaste físico de los extremos y sus incorporaciones al interior para evitar dejar fluir a la Deportiva Ponferradina fue determinante. 

Segunda parte, con duro desenlace 

La segunda mitad comenzó sin cambios y sin tela que cortar. Los dos equipos parecían más ansiosos por llegar al área contraria, pero ninguno lo lograba. Rastrojo seguía siendo el más acertado del equipo conjunto local, con una acción individual muy similar a la de la primera mitad, con tiempo para regatear, irse de su rival y acabar cruzando el balón, forzando un nuevo saque de esquina, mientras que el bando rival se encomendó a Yuri en el 58, sentando en su lugar a Álvaro Vázquez. Ponz esperó al 65, para hacer el que viene siendo habitual cambio de Nespral por Jordi Tur, al mismo tiempo que la Ponferradina se hacía más presente en el terreno de juego y adelantaba líneas. 

Ahora bien, lo gordo llegó después. El cuerpo técnico de Unionistas se decantó por el doble lateral con Jon Rojo en el lateral derecho junto a Carlos Giménez, entrando el número 3 por Alfred Planas, mientras que Ewan hizo lo propio por Rastrojo, hasta el momento el jugador con más profundidad de los charros. Se mostraba cabreado el extremo de Unionistas, que negaba con la cabeza sin esperarse el cambio. 

Acto seguido, dura respuesta a balón parado de la Ponferradina. En su único disparo entre los tres palos de todo el partido, el equipo de Íñigo Vélez se adelantó en el luminoso con un golazo de Markel Lozano, que logró zafarse de la defensa de Unionistas, rematando a placer el centro tras falta desde el costado derecho. Y más cambios en Unionistas, quizás demasiados. Ramiro se sentó por Camus y Slavy entró por Losada, aunque era Javi Billar el que seguía brillando en el campo. Entre medias, paradón de Cacharrón a disparo raso de Dacosta, que el colegiado, bastante perdido a lo largo de todo el encuentro, no validó como saque de esquina. 

Las caras en el banquillo lo decían todo, todos estaban de pie, todos sabían lo que suponía una derrota. No era justo el mercador y Unionistas acabó con dos clarísimas ocasiones que no logró materializar, en botas de Teijeira. 

Eso sí, los 'injustos' ya son demasiados y mientras tanto el equipo continúa cayendo en la tabla.