Salamanca emerge como la tercera provincia que más donaciones aporta al sistema sanitario de Castilla y León. Pese a  que la disminución con respecto a 2021 (de 13.662 a 13.474) "no es significativa", según valor la Hermandad de Donantes de Sangre de Salamanca, sí se observa una disminución paultina en los últimos años, especialmente, desde 2015 cuando se logró el pico de 15.305 donaciones. 

Los motivos de esta disminución, según apunta su presidente, Fernando Barbero Palomero, son dos principalmente. Por un lado, el conocido envejecimiento de la población, ya que no se puede donar a partir de los 65 años de edad, mientras que la segunda razón surge por el horario impuesto desde la pandemia en el punto fijo de donación. 

Con mayor regularidad antes y muy cambiante ahora, Barbero considera que "no son los horarios más adecuados porque al donante le cuesta saber cuándo y cómo puede donar". En estos momentos, el punto fijo de donación en la segunda planta del Virgen Vega, en el edificio de consultas número 2, y prevé su posterior ubicación en el Hospital Nuevo aunque todavía no hay fecha prevista. 

Según informan además, no hay unas razones concretas para el mantenimiento de un horario que varía en función de semanas pares e impares; las semanas pares el horario es de tarde (de 15:00 a 22:00) y las impares de mañana (de 08:00 a 15:00). "No nos han dado ninguna explicación", demanda. Aunque sí afirma que ya se han reunido con el consejero de Sanidad para paliar la situación, Alejandro Vázquez. 

El punto fijo es el punto de extracción que más donaciones registra, con un total de 5.300 de las 13.474, pero como aseguran desde la Hermandad de Donantes de Sangre cada vez hay menos donaciones en ese lugar en concreto. Y si tenemos en cuenta que algunas donaciones, como las de aféresis, solo se realizan ahí, la situación se convierte en problema. 

"Cuantas más limitaciones, menos donaciones", finaliza Barbero.