Los equipos de tierra no han podido controlar esta noche el incendio forestal declarado el martes en la montaña de Candelario tras una quema controlada ejecutada por la Junta de Castilla y León.

Con el amanecer han vuelto los cuatro helicópteros que actúan en este operativo, que tienen un papel imprescindible porque el fuego está en una zona alta a la que no pueden llegar los camiones autobombas, por tierra sólo pueden acceder los efectivos caminado por senderos, según han explicado a Efe este miércoles fuentes de la Junta.

El incendio se declaró el martes sobre la una de la tarde cuando una quema de árboles controlada de la Junta "se fue de las manos", según ha indicado a Efe la Asociación de Trabajadores de Incendios Forestales de Castilla y León (ATIFCYL).

Preguntadas por esta quema, las fuentes de la Junta sólo han confirmado que sí se hizo y que se investiga como posible causa del incendio, pero no han detallado qué personal la estaba ejecutando ni el tipo de árboles que se estaban quemando.

La ATIFCYL considera que "este no es un momento adecuado para quemar, con más de 20 grados, con viento". "Lo que nos cuentan nuestros compañeros que están allí es que se ha ido de las manos", ha indicado el portavoz de los trabajadores de incendios forestales.

"Con la caída de la tarde el viento ha cambiado su dirección, y ya sin helicóptero nos vemos obligados a entrar y salir del frente por precaución", indicó este martes en su Twitter el Refuerzo en Incendios Forestales en Pinofranqueado (Cáceres), que pertenece al Ministerio de Transición Ecológica.

Bomberos de la Junta de Castilla y León y esta brigada de Extremadura luchan desde primera hora de la tarde del martes contra este incendio producido en una zona alta de montaña y con vegetación de matorral.

El incendio está lejos de la población de Candelario pero junto a una zona de alto valor ecológico como es la Dehesa de Candelario, según ha explicado a Efe el alcalde del municipio, Pablo Hernández (PSOE).