Garban, el más listo de la clase, da tres puntos al Guijuelo que convierte el play off en realidad

Club Deportivo Guijuelo y Zamora disputaban en el Municipal un encuentro por todo lo alto en el que la victoria para cualquiera de ellos podía significar un paso en firme en busca de un puesto de play off de ascenso. Se preveía un partido igualado, probablemente resuelto por algún pequeño detalle, y la realidad es que así fue en una acción personal protagonizada por Garban cuando el encuentro alcanzaba ya el minuto 80. 

De manera previa fue un partido de muchísimo control y con más destrucción que juego y capacidad de unos y otros por llegar al área. Por sensaciones, sobre todo en el primer tiempo, el Zamora estuvo más cómodo y tuvo algo más de balón pisando el área en alguna ocasión aunque sin probar al portero del Guijuelo. Los visitantes pedían penalti por mano a los diez minutos de partido pero el árbitro no lo admitió y durante esos primeros 45 minutos solo los balones parados lanzados sobre el área crearon algún tipo de incertidumbre.

En la reanudación el partido transcurría de forma similar, sin ocasiones, aunque en el 68 sí que Sancho colgó un balón peligroso al área que remató arriba Carlos López en la amenaza más seria del Zamora sobre la portería del Guijuelo.

Movió el banquillo Mario Sánchez buscando más velocidad arriba para tratar de aprovechar el desgaste de los minutos en el rival y el movimiento le salió a la perfección. Un envío sobre Garban que le ganaba la partida en la pugna a Prad y se marchaba hacia el marco sorteando al portero y marcando a placer. Un gol de listo que desnivelaba el duelo que entraba en minutos de tensión porque el Zamora ya jugaba a la desesperada mientras el Guijuelo trataba de contemporizar y se encontraba en inferioridad por la roja que veía Perea ya en el 90 y con nueve minutos de alargue por delante. Y ya pasados esos nueve minutos, el mayor susto para los locales con el larguero que besó el chut de Del Álamo. 

Al final con 11 minutos de más disputados, el triunfo se convirtió en realidad y el gol de Garban que permite soñar al Guijuelo.