¿Qué personaje histórico se merece un medallón en la Plaza Mayor?

La idea de dedicar un medallón de la Plaza Mayor al rey Alfonso IX surgió en 2018, durante el VIII Centenario de la Universidad. Después de todo, aquel monarca puso los cimientos de lo que hoy es la Usal y la ciudad le debía algún tipo de reconocimiento público. Han pasado cinco años y al fin hay un diseño ganador y un emplazamiento adecuado para colocar el retrato alfonsino.

Podemos preguntarnos quién más ha hecho méritos para tener un medallón en la Plaza. Ya tenemos reyes, militares, escritores, santos, músicos... ¿falta alguien? Contesta el exalcalde de Salamanca y estudioso de la historia de la ciudad, Jesús Málaga. 

El primer nombre que pone sobre la mesa es Juan del Enzina, un poeta, músico y dramaturgo salmantino que el diccionario biográfico de la Real Academia de la Historia presenta como "padre del teatro castellano, pues es el primero que efectivamente ofrece a la posteridad una amplia obra concebida y representada como auténtico espectáculo teatral". Otro ilustre aspirante, según Málaga, sería Pedro Calderón de la Barca, genio de las letras españolas y "exalumno de Salamanca".

Pedro Calderón de la Barca. (Foto: RAH)

Pasamos de la literatura a la política. Málaga opina que en 2005, cuando se añadieron algunos medallones reales (Amadeo de Saboya, Alfonso XII...) "se perdió una oportunidad. Al poner reyes con poca calidad humana, como Fernando VII, se podría haber colocado a José I Bonaparte, que también fue rey de España", aunque sus contemporáneos le considerasen un usurpador del trono y los franceses no dejasen un buen recuerdo en nuestro país. "No sé si ya es el momento" para plantearlo, admite.

Santas laboriosas  

Jesús Málaga opina que "faltan mujeres" en la Plaza Mayor y sugiere a Santa Bonifacia Rodríguez de Castro, fundadora de las Siervas de San José elevada a los altares en 2011. "Fue una religiosa muy abierta, que rompió con la ñoñez del siglo XIX. Fue muy interesante, centrada en la labor hacia la mujer trabajadora". Las únicas que tienen un medallón propio son Isabel II y Santa Teresa de Jesús, porque Isabel la Católica, Juana la Loca y Sofía de Grecia lo comparten con sus parejas. También hay alegorías de las dos Repúblicas, pero no pueden contarse como 'mujeres reales'.

Según el cronista de Salamanca, la ciudad "ha sido un poco madrastra" con sus hijos ilustres, con el agravante de que "además tiene donde elegir" porque "hay muchos personajes" insignes vinculados con la ciudad: el astrónomo renacentista Abraham Zacut; el músico Sebastián de Vivanco; el militar comunero Francisco Maldonado; los Papas Alejandro IV o Benedicto XIII, grandes valedores de la Universidad o, ya en la era contemporánea, el jurista Pedro Dorado Montero, 'padre' del Derecho Penal actual; o el director Basilio Martín Patino, "el gran cineasta de Salamanca". En resumen "no nos damos cuenta de lo que tenemos".

El comunero Francisco Maldonado. (Foto: RAH).

El exalcalde añade un detalle que ayuda a comprender mejor la disposición de los medallones. La "idea iconográfica" original de la Plaza se ha cumplido sólo a medias. La intención de los constructores era dedicar el pabellón Real a los reyes; el de San Martín a los "héroes"; el de Petrineros a los "santos y poetas" y el del Ayuntamiento a las personalidades de Salamanca. Lo consiguieron con los dos primeros, pero en el resto hay de todo un poco. 

El medallón de Alfonso IX, a todo esto, se tallará en Petrineros antes del verano. Quién sabe cuánto tiempo pasará antes de que Salamanca inmortalice otro rostro en su Plaza Mayor.