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Asaja pide a la Junta que autorice las quemas de restos de poda en Castilla y León

Asaja ha advertido al respecto de que en muchas ocasiones los tratamientos alternativos a la quema para la gestión de plagas "no son suficientes"

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Asaja pide a la Junta que autorice las quemas de restos de poda en Castilla y León
R.C.G.T
R.C.G.T
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Los responsables de Asaja en Castilla y León han solicitado este miércoles a las consejerías de Agricultura y de Medio Ambiente que autoricen las quemas controladas en cultivos leñosos y silvícolas como han hecho ya otras comunidades autónomas.

La OPA pide en concreto la publicación de una Orden que permita las quemas controladas en cultivos leñosos y silvícolas y que establezca para cada cultivo las diversas plagas y enfermedades para las que se autoriza esta acción.

Según ha explicado Asaja, la Ley de Residuos y Suelos Contaminados para una Economía Circular de abril de 2022 ha establecido la
prohibición con carácter general de la quema de residuos vegetales generados en el entorno agrario o silvícola y sólo permite esta práctica de forma excepcional "por razones fitosanitarias y previa autorización individualizada".

Asaja ha advertido al respecto de que en muchas ocasiones los tratamientos alternativos a la quema para la gestión de plagas "no son suficientes", como es el caso de la opción de picar los residuos y restos vegetales, inviable "en muchas zonas de la Comunidad" por el coste de la operación y porque las empresas dedicadas a esta función están trabajando de forma continua en los territorios afectados por los incendios de este año por lo que no dan opción a realizar sus labores en zonas más pequeñas.

Entre las enfermedades y plagas que afectan a los cultivos leñosos y silvícolas presentes en Castilla y León para los que no son suficientes los tratamientos fitosanitarios y podas están la yesca, eutypa sp., agrobacterium sp, en el viñedo; el mancha ocre, lepra, alternaria, en el almendro; la alternaria, septoriosis, verticilosis, en el pistacho, y la antracnosis, chancro, podredumbre gris, Phytophthora cinnamomi en encinas, robles y alcornoques.

Por este motivo, Asaja ha defendido defiende la quema controlada de restos vegetales "como medida excepcional". Según ha explicado la OPA, la quema controlada de restos vegetales es una práctica cultural tradicional que realizada de forma adecuada "se convierte en una medida fitosanitaria muy efectiva a la vez que beneficiosa para el medio ambiente por la reducción del uso de fitosanitarios que implica".

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