Los casos de coronavirus en Salamanca, como ha ocurrido en toda la Comunidad, han descendido casi un tercio en la última semana pese a lo cual hay un dato significativo e indicativo de que estamos lejos de hablar de una situación controlada y es que en estos últimos siete días han sido nueve las defunciones registradas en el hospital de la capital salmantina relacionados con esta enfermedad. Una cifra que sumada a las que se vienen dando durante buen parte del verano confirma lo que alertan algunos expertos como Margarita del Val y es que estamos en un verano en el que las muertes por coronavirus se han multiplicado de forma notable respecto a los meses de julio y agosto de 2021.

Ella habla de una multiplicación por cuatro pero en Salamanca va incluso mucho más allá, sobre todo si nos referimos al mes de julio. 

Cierto es que el mes de julio de 2021 en el Complejo Asistencial de Salamanca fue el de la calma después de la tempestad en el que se consiguió reducir a mínimos los ingresos y también la cifra de fallecidos fue exigua respecto a lo conocido anteriormente. De hecho en el recuento diario de todo el mes fueron cuatro las defunciones achacadas a la enfermedad con la mayoría de los días del mes dejando como alegría ver el 0 en la estadística diaria. La situación en 2022 ha sido diferente y la estadísticas que publica Sacyl cifra en 45 los muertos. Algo parecido sucede al comparar el mes de agosto de uno y otro año, aunque ya en 2021 comenzó a crecer la ola de contagios, ingresos y defunciones con seis en los primeros 19 días del mes. En 2022 han fallecido ya 26 personas en o que va de mes. 

¿Las causas? Según la experta, que cree que hay medidas preventivas que se retiraron demasiado pronto, no es "porque estén fallando las vacunas", sino porque "estamos teniendo un comportamiento probablemente cuatro veces superior en riesgo en exposición al virus del que tendríamos que tener".

En todo caso señala que ahora es el momento de prepararse para el otoño. "En épocas de bonanza es cuando hay que apagar el fuego", ha sentenciado. Es decir que es un buen momento para poner en marcha medidas de cara a otras épocas que se prevén más complicadas. Por ejemplo, acciones como aprender a mejorar la calidad del aire, del aire o a utilizar los antivirales son algunas por las que apuesta la investigadora, que ha hecho estas declaraciones a los medios en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) en Santander.