La Policía Local detectó el caso en un control rutinario en la avenida de Portugal durante la madrugada del sábado
La provincia mantiene activos en nivel dos el incendio forestal de Monsagro y en nivel uno el de Candelario
Hasta 20 medios aéreos se reúnen en la comarca mirobrigense, mientras una decena se afana en la Sierra de Béjar
La provincia de Salamanca continúa este jueves en nivel dos de alerta por la acumulación de incendios forestales. Es la consideración que mantiene el más grave, en la localidad de Monsagro, donde trabajan hasta 20 medios aéreos, mientras el de Candelario, en la Sierra de Béjar, continúa en nivel uno, con la mitad de medios aéreos, según el marte matutino emitido por la Junta.
En lo que se refiere al incendio que más preocupa, el generado en Extremadura el pasado lunes, y que sigue devastando hectáreas en el término municipal de Monsagro, la Junta informó de que, además de los 20 medios aéreos, trabajan, coordinados desde el Puesto de Mando Avanzado, nueve técnicos, 23 agentes medioambientales, seis cuadrillas de especialistas, dos cuadrillas helitransportadas, una decena de buldózer, seis autobombas, tres cuadrillas nocturnas, once cuadrillas de tierra, un equipo técnico de Castilla-La Mancha y una unidad de intervención de la Unidad Militar de Emergencias.
En el incendio de Candelario, a esta hora trabajan, además de los diez medios aéreos, cinco técnicos, nueve agentes medioambientales, tres cuartillas de especialistas, dos cuadrillas helitransportadas, seis autobombas, ocho cuadrillas de tierra y una unidad móvil de análisis y planificación.
Respecto al resto de incendios de la provincia, la Junta da por extinguido desde las 21.00 horas del miércoles el de Miranda del Castañar, que llegó a alcanzar el nivel uno. Los mismo sucede con los fuegos en Saelices El Chico y Puerto Seguro. Por último, sobre las 00.70 horas de este jueves se declaró un incendio en el término municipal de Fuentes de Oñoro que se dio por controlado a la 01.17 horas gracias al trabajo de dos agentes medioambientales y una autobomba.
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