El Salamanca Rugby Club ha dado un paso de gigante en su reto a corto plazo, contar con cada vez más presencia y apoyo dentro de la capital charra con el fin a medio y largo plazo de seguir creciendo como club desde una base sólida como es su cantera. Después de una temporada redonda, en la que solo han perdido dos partidos y en la que se ha conseguido el subcampeonato regional frente a León en una final de lo más igualada, los de Héctor García Real se pueden permitir ir a los play off de ascenso sin ninguna presión, teniendo la oportunidad de disfrutar de un camino ya hecho. 

Como todo gran logro, hay una historia detrás. La pandemia acabó con la competición de rugby en Salamanca durante dos años. Así, la rabia y ansia contenida por volver a disfrutar de esa sensación sobre un campo de cédped lanzaron a los de Héctor García a una temporada inolvidable. Precisamente, el entrenador, uno de los máximos culpables (en positivo) de este logro coral, cuenta cómo ha sido, en una entrevista con Tribuna de Salamanca, la vuelta a la competición después de dos años alejados:

"Sinceramente, empezamos con muchas ganas. Había ganas de competir, de jugar de entrenar. Estábamos a la expectativa, no sabíamos cómo iba a surgir todo, si el grueso del equipo iba a continuar y finalmente sí, contamos con gente nueva también y cinco chavales que han subido de sub18. Hemos conseguido un buen margen de fichas y de gente siendo una temporad amuy muy buena", comienza. 

No queremos crecer desde arriba con un gran equipo senior sin una base de niños

Para establecer un contexto, ¿de qué nivel estamos hablando dentro de la competición regional en la que se encuentra Salamanca Rugby Club?  "Es un nivel bastante parejo. Casi todos los equipos, salvo dos, son bastante parejos. Luego, hay dos equipos de los tres que hay en Valladolid que son una incertidumbre porque son un tercer equipo de los equipos grandes que hay en Valladolid y dependiendo de las fechas de partidos del resto de sus equipos tienen a jugadores o no. Nosotros lo que tratamos de hacer es crecer desde abajo. No queremos crecer desde arriba con un gran equipo sénior sin una base de niños que es lo importante. Al final, el día de mañana es de lo que tienes que tirar", explica. 

Siendo así, ¿de qué nivel de profesionalidad hablamos dentro del equipo sénior? "Cero. Aquí no cobra nadie, estamos porque nos gusta este deporte, pero así lo hemos hecho los demás desde hace 30 años. En España es muy difícil vivir de esto, habría que irse a División de Honor y dentro de ahí hay gente semi profesional. No es comparable para nada con un jugador de fútbol o baloncesto. La gente que mejor vive de este deporte es gente muy integrada en la selección española o equipos de muy alto nivel en División de Honor. Hay equipos que en Regional fichan jugadores con el objetivo de ascender a División de Honor B, eso sí, porque es un salto muy grande", asegura. 

Y precisamente hablando de ello, ¿cómo se valora desde el club esta oportunidad de jugar un play off? ¿Hay posibilidades reales? "Posibilidades deportivas siempre las hay, siempre que compites o ganas o pierder y nadie sale al 100% de ganar o perder. Ahora bien, nosotros no tenemos equipos para poder competir, por ejemplo, con equipos como Oviedo, quien creo que será el equipo a batir, porque tiene una estructura totalmente diferente a lo que tenemos el resto. Hay dos equipos en Galicia y otro en la liga vasca que siempre están ahí, subiendo y bajando. Hay que tener en cuenta que quedarse en División de Honor B es muy complicado, a parte del nivel físico y competitivo, los desplazamientos son mucho más grandes y los gastos también. ¿Nosotros? Nosotros saldremos a competir. Para nosotros es un regalo. Si ascendemos el club nos ha dicho que va a ir con todo, pero siendo realistas no tenemos ni estructura de equipo ni de club para buscar el ascenso a por todas. ¿Qué llega? Pues perfecto y si lo conseguimos jugando, mucho mejor", responde ilusionado. 

Ese "y si ascendemos"... pasa por lo siguiente: Para el ascenso a la División de Honor B hay un total de cuatro grupos diferenciados; en la zona norte se encuentran los equipos castellanoleoneses junto a Galicia, la liga astur-cántabra y la liga vasca, donde se integra Navarra, País Vasco y La Rioja. Así, se llevan a cabo una serie de eliminatorias, para un total de seis partidos. Es deicr, para ascender se deben superar tres eliminatorias a partidos de ida y vuelta. Solo asciende uno y el que queda segundo tiene repesca con el que baja de DHB. 

El primer partido es el fin de semana del 23 de abril y ya han conseguido atraer a 500 personas para el partido de la final, en una auténtica "fiesta". ¿Por qué no disfrutar y abrir el regalo con más aficionados en la grada?