El club ha despachado ya más de 1.300 entradas
Del sufrir al disfrutar o el paso al 'lolismo': "Si todo se encauza en una dirección, el potencial del Salamanca es muy importante"
Lolo Escobar se ofreció al Salamanca en pretemporada, se volvió a ofrecer cuando Egea sale y a la tercera fue la vencida (Y si...). Habla de todo. Del pasado y del futuro, de los jugadores que estaban y de los recién incoporados. Eso sí, le sobran las palabras hacia la afición.
(Entrevista grabada antes de conocerse el positivo y con una prueba negativa ese mismo día). Llegó con un equipo en ruinas y ahora construye las bases que deberían haber sido establecidas a principio de temporada. Con el tiempo a contracorriente, Lolo Escobar ha conseguido dar la vuelta a todo; afición, jugadores y aunque poco sabemos de ellos, directiva, navegan en la misma dirección. Sí, el equipo ha conocido el primer descenso sin poder optar a algo mejor, pero lo que se vive en el Helmántico, por momentos hace olvidar rápido esas penas rodeadas por la palabra 'fracaso'. El reciente entrenador del Salamanca lo tenía muy difícil, pero el camino, ya sembrado, comienza a florecer.
Ocho jornadas y siete derrotas, seis de ellas seguidas, así llego Escobar a su equipo. Todo iba mal, hasta que el timón cambió de mandos y como primer paso, se cambió el pensamiento del equipo: "Solo había tristeza; todo el mundo pensaba que eran merecedores de todo lo malo que les pasara. Me pasó con todos los miembros del club y de todas las esferas, no se puede pensar así. Yo no creo en eso, no creo en la buena o mala suerte, creo en el trabajo y todo condiciona lo que estaba pasando. Ese ha sido el principal cambio; a nivel de mentalidad dle grupo. A partir de ahí, se refuerza con resultados, es cierto que no es una racha ganadora bestial, pero es cierto que es romper una dinámica de siete derrotas seguidas. La plantilla se lo ha ido creyendo y se ha pensado que era merecedora de que les pasaran cosas buenas y es lo que ha ocurrido".
¿Un ejemplo de ello? La última jugada que le da el triunfo frente a Unionistas de Salamanca. "El gol es un remate normal, que bota mal y nos favorece. Eso es fruto de un cambio de mentalidad de un proceso de dos meses". Precisamente, un rival que tenía la dinámica totalmente contraria al principio de temporada, todo le salía bien: "Unionistas no necesitaba tener grandes ocasiones para ganar los partidos, ellos sabían que iban a tener su ocasión, estaban super tranquilos y super trabajados, con la confianza de que la que tuvieran la iban a meter, que les ha llevado a estar donde están. Todo lo contrario a nosotros. Nosotros pensábamos que como el rival tuviera media ocasión iba para dentro. El cambio de pensamiento ha sido fundamental. Valdano dice que cuando un equipo ha ganado cinco partidos seguidos lo más probable es que el sexto también lo gane y que cuando ha perdido cinco, lo más probable es que el sexto también lo pierda.", explica el míster del Salamanca.
Coincide en la necesaria presenta de los jugadores que han llegado en el mercado invierno, pero un centro del campo del que no deja de presumir, formado por Llorente, Amaro y Molina, ya estaba en la mochila, ¿qué ha cambiado y por qué no se ha sabido aprovechar previamente? "El medio del campo del Salamanca no tenía una identidad de juego, tú puedes tener a los mejores, que si no saben a qué tienen que jugar es complicado sacar resultados. De lo que más me he preocupado es de saber a qué quería que jugara el Salamanca, transmitírselo y que ellos creyeran en ello. Creo que jugadores como Amaro, Molina o Llorente han crecido jugando así, si hubiéramos jugado de otra manera es imposible que luzca ese centro del campo. Creo que juegan a lo que yo quiero que jueguen y además piensan que es la mejor forma, y eso es muy importante".
En definitiva, cambiar la mente del equipo a través del juego, en contraposición a lo habitual. Defender y luego atacar.. Lolo es más de atacar mejor para defender, todavía mejor. "Empezamos a trabajar solamente aspectos ofensivos", reconoce, "ello hizo que llegáramos con más gente, que estuviéramos más cerca de zonas de remate, que si hubiera una pérdida poder robar...y poco a poco empezaron a aparecer las porterías a cero. Hemos intentado atacar mejor, para que la defensa se fuera arreglando casi sola".
"Hacer cambios es complicado cuando el equipo está tan bien, se junta el hambre con las ganas de comer"
¿Hay poco recambio en el Salamanca? "Lo primero que pensé es que era imposible tener contentos a los 22, necesitando resultados ya. Me tenía que centrar en un número pequeño de jugadores, darles mucha importancia y empezar a sumar. Entiendo que algunos se habrán sentido perjudicados con esta forma de pensar, pero entendía que para salir de la situación clasificatoria en la que estábamos me tenía que centrar en un número corto de jugadores. Conforme fuera pasando el tiempo, iría aumentando el número de jugadores que fueran aportando al equipo. También es verdad que hacer cambios es complicado cuando el equipo está tan bien, se junta el hambre con las ganas de comer. Creo que hay jugadores como Telles, Nacho, Uxío...que son profesionales y que dan la cara 100%, hay muchos que son muy valiosos", cuenta.
Sin la posibilidad de algo mejor, la última victoria en el Helmántico supuso una celebración por todo lo alto, ¿qué ocurre entre afición y jugadores para que esto ocurra? "El equipo ahora mismo se siente muy importante y muy fuerte. Como grupo y como familia el equipo está a un nivel muy alto de rendimiento y podría poner a cualquiera que creo que lo van a hacer bien, aunque tenga mis preferencias y quiera jugármela con unos o con otros. Con respecto a la afición...creo que es increíble. Me ha llamado la atención cómo se ha crecido el estadio ante la adversidad. Cuando peor estaba el equipo, más apoyo ha habido. Cuando llegué había una desunión de todos los estamentos y recibí tantos comentarios...me tiraba horas respondiendo mensajes de ánimo. No creo que haya aficiones así", asegura. Quizás era lo que necesitaban, cercanía y transparencia.
Necesitabas afición, conseguido, jugadores, también conseguido, ¿qué hay de la directiva? "Sinceramente, hubiera sido muy difícil si el equipo no hace el esfuerzo económico de cambiar algunos jugadores, había jugadores que sabía que no iban a cuadrar conmigo, ya no futbolísticamente sino por personalidad. El club me ha respaldado y ha tomado decisiones que eran bastante difíciles y duras. Necesitábamos que no todas las caras fueran de mirar al suelo, sino que tuviéramos algo por donde empezar. Gente que no estuviera metida en una dinámica negativa y que a todo lo que le digas será receptivo y va a contagiar la alegría que faltaba a kilos dentro del vestuario.
¿Y si hablamos del futuro? "Tenía claro que una de las líneas maestras que iba a seguir es el partido a partido. Yo no puedo a esta plantilla hablarle de objetivos ambiciosos y largos, tengo que hablar de que el domingo podemos conseguir 21 puntos para afrontar una segunda vuelta en la que nos podemos divertir. Hasta ahora el equipo solo sufre, porque tiene que ganar, porque tiene que puntuar, porque no puede perder...quiero que se diviertan, porque se lo merecen y yo también. Los 90 minutos se viven de otra manera". Con respecto a la segunda vuelta Lolo ya ha comenzado a analizar equipos, aunque en la última jornada puede ocurrir cualquier cosa.
¿Y a largo plazo? "No lo sé, siempre he buscado que mi familia sea feliz y si lo están en Salamanca, perfecto. Al final, soy un profesional y además de por sentimientos, que está claro que aquí me han tocado el corazón, te mueves por oportunidades y momentos, hay momentos que tienes que aprovechar y creo que ahora mismo estoy en un buen momento, pero...no sé lo que pasará conmigo, no tenog ni idea. Me encantaría hacer un proyecto firme y sólido en Salamanca. Creo que existe lo principal para poder estar arriba; afición, estadio, presupuesto...Si todo se encauza en una misma dirección el potencial del Salamanca es bastante importante".
Del Helmántico a casa y de casa al Helmántico, con la borrasca 'Filomena' y también buen tiempo, Lolo Escobar aprovecha para trabajar su tiempo en Salamanca, y si...(acaben la frase).
El torneo se celebró en la localidad vallisoletana de Medina del Campo
"Fue un proceso, con afición, inversión y trabajo. La Copa de 2005 marcó el inicio de todo", señala Recio
El equipo salmantino afronta otra cita con la Copa en un torneo que conquistó por primera vez hace 20 años en tres partidos que fueron un ejercicio de fe