Con motivo de la celebración del Día Mundial del Riñón, que tendrá lugar el próximo 13 de marzo de 2025, Alcer Salamanca y diversas sociedades científicas y organizaciones sanitarias han alertado sobre la "preocupante evolución de la enfermedad renal crónica", la cual se ha convertido en un grave problema de salud pública en España.

Según han informado Juan Carlos Sánchez, presidente de Alcer Salamanca, y Pilar Fraile, jefa del Servicio de Nefrología del Complejo Asistencial Universitario de Salamanca, "la enfermedad renal crónica sigue creciendo en nuestro país, afectando al 15% de la población.

"La prevalencia del tratamiento renal sustitutivo ha aumentado más de un 30% en la última década, alcanzando ya a más de 67.000 personas en tratamiento". Además, "cada año ingresan en diálisis o trasplante una media de 7.000 personas, de las cuales un 25% lo hace a causa de la diabetes".

A pesar de su gravedad, la enfermedad renal crónica sigue siendo desconocida para gran parte de la población. "Tiene un alto impacto socioeconómico y en la calidad de vida de los pacientes, debido a que sus síntomas son poco reconocibles en los estadios iniciales, lo que dificulta su diagnóstico precoz y tratamiento", han señalado los expertos. Por ello, insisten en la necesidad de implementar programas de detección temprana para identificar la enfermedad antes de que alcance sus fases más avanzadas. "La tasa de infradiagnóstico supera el 40%", lo que refuerza la necesidad de que las autoridades sanitarias y administraciones públicas intensifiquen sus esfuerzos en prevención y diagnóstico precoz.

"Si no hacemos nada, para el año 2040, una de cada dos personas mayores de 40 años tendrá enfermedad renal crónica, convirtiéndose en la quinta causa de muerte en nuestro país", han advertido.

El crecimiento de esta enfermedad está relacionado con factores de riesgo como la diabetes y la enfermedad cardiovascular, responsables del 40% de los casos, así como con otras afecciones prevenibles como la obesidad, la hipertensión y el tabaquismo. "Si logramos detectar de forma temprana el deterioro de la función renal, podemos retrasar hasta 20 años la necesidad de ingresar en diálisis o trasplante", han destacado. Para ello, bastaría con "sencillos test de orina y sangre para medir la creatinina".

Además, los especialistas han subrayado la importancia de fomentar el trasplante renal, ya que es la mejor solución para quienes necesitan tratamiento renal sustitutivo. Sin embargo, este procedimiento "se ve limitado por la escasez de riñones disponibles". En este sentido, han destacado la necesidad de promover la donación en vida, un procedimiento que ya representa el 10% de los trasplantes renales en España, con resultados muy positivos en términos de supervivencia y reducción de complicaciones.

Otro de los puntos clave para mejorar la atención y calidad de vida de los pacientes es potenciar la diálisis domiciliaria (peritoneal o hemodiálisis domiciliaria). "Nuestro objetivo es que el 30% de las personas que inician diálisis lo hagan en sus hogares, ya que se trata de un tratamiento más flexible y personalizado que el hospitalario, proporcionando múltiples beneficios clínicos y mejorando la autonomía de los pacientes", han señalado los expertos.

Entre las ventajas de la diálisis domiciliaria, se encuentra su impacto positivo en la conciliación laboral y familiar, así como en la sostenibilidad ambiental. "Este método consume un 80% menos de agua, un 93% menos de electricidad, genera un 60% menos de gases de efecto invernadero y reduce en un 35% los residuos en comparación con la diálisis hospitalaria".

En este sentido, han hecho hincapié en la necesidad de implantar modelos de diálisis domiciliaria asistida, que permitirían ampliar los tratamientos en casa, especialmente para personas de mayor edad.

Desde Alcer Salamanca, han hecho un llamado a la población, a los profesionales sanitarios y a las autoridades, para reforzar la concienciación sobre la enfermedad renal crónica. "No solo afecta a personas mayores o con diabetes; cualquier persona debe conocer el estado de su salud renal". Insisten en que "es fundamental realizar chequeos anuales en Atención Primaria para detectar la enfermedad a tiempo".

"Cuidar nuestros riñones es proteger nuestra salud. Es hora de actuar y saber si están bien nuestros riñones. Si lo descubrimos a tiempo, protegemos nuestra salud renal. Hay que hablar más sobre esta enfermedad, porque el diagnóstico tardío es un problema muy grave", han concluido los expertos.