Ééxito en una nueva edición de la prueba a pesar del mal tiempo con victoria de Jorge Vidal y Elena García
Escaso punto para el Guijuelo en un partido que tenía que ganar
Solo pudo firmar tablas ante el último clasificado, que además se había adelantado en el Municipal (1-1)
El CD Guijuelo solo pudo sumar un punto en el Municipal en el duelo en el que recibía al colista y en el que parecía que tenía la posibilidad de enderezar el rumbo como local. Eso debería ser su pista de despegue para huir de una vez de la zona de peligro pero no hay manera y se siguen escapando oportunidades. Y eso que también se puede dar la vuelta la tortilla y señalar que esta vez al menos rescató un punto después de verse por debajo en el marcador.
Llegaba el Laredo al campo salmantino y desde el primer minuto, pese a que la tarde no se puso en las mejores condiciones por la lluvia, el Guijuelo mostró que quería buscar portería contraria para intentar adelantarse pronto en el marcador y a partir de la tranquilidad del 1-0 construir el triunfo. Sin embargo las primeras ocasiones se marchaban y en una acción balón parado cuando el choque superaba la media hora de juego, era el Laredo el que se adelantaba por mediación de Iker.
Otra vez a remar a la contra y sin posibilidad de empatar antes del descanso. Por suerte ese 1-1 llegó nada más reanudarse el choque por mediación de Morales que recogió un rechace en la zona de frontal y la colocó muy bien entre una maraña de jugadores. Un tanto que daba un respiro y que podía ser el impulso para lo que restaba de segunda mitad pero con el campo cada vez con más agua y un rival encerrado no hubo forma de encontrar la ocasión para conseguir el objetivo.
Reconoce que el equipo no supo llevar a cabo lo que habían trabajado durante la semana: "No había traumas ni fantasmas... No hemos sabido gestionar los subpartidos"
Suma su quinta derrota consecutiva a domicilio en otro partido sin contundencia atrás ni presencia ofensiva hasta el tramo final (2-1)
El equipo salmantino destroza a PBB Godoy Maceira (101-58) con un Ayo imparable y una actuación coral