A Unionistas no le sale el plan ante un líder inapelable

Ilusión es una palabra que Unionistas ha querido y conseguido que presida el inicio de su temporada y con ella se esperaba el duelo ante la Cultural y Deportiva Leonesa por eso de ver hasta dónde era capaz de competir el equipo no solo ante un rival de nombre si no también un contrincante que a todas luces es el mejor en este inicio de campeonato.

Comprobar si había un plan y ver cómo se ejecutaba para intentar sorprender a un líder que desde el minuto uno ejerció como tal. Idea de hacer algo distinto a lo esperado había en Unionistas o al menos eso pareció con una alineación que sorprendió, principalmente por la ausencia de Aitor, pero la realidad es que no funcionó.

O Unionistas no se adaptó a los cambios o la Cultural los leyó muy bien o ni siquiera se alteró porque desde el inicio llevó la iniciativa y el peligro, fundamentalmente desde su banda izquierda con un Álvaró que dio la noche a Imanol Baz con su velocidad y desborde. Solo en la primera mitad fueron varios los centros peligrosos que puso, aunque no solo de sus pies llegaba el peligro.

El gran problema de Unionistas es que no encontraba balón y tenía muchísimos problemas para llegar al campo de la Cultural que se acentuaron además tras el tempranero gol del equipo visitante. Corría el minuto 13 cuando Chacón, en este caso desplazado a la derecha, era el destinatario de un pase filtrado con muchísimo peligro y presto para el mano a mano la dejó atrás ante la entrada desde segunda línea de un imponente Barri que solo la tuvo que empujar.

A partir de ahí, la Cultural a jugar sin prisa ninguna aunque eso sí acelerando cuando alcanzaba la zona de tres cuartos y Unionistas sin encontrar cómo avanzar primero porque tenía poco balón y segundo porque cualquier intento de envíos directos no encontraba destinatario. Faltaban referencias en la zona de creación con una medular muy despoblada como si no hubiera nadie al mando y en cualquier situación aparecía la Cultural en superioridad.

Lo único bueno del primer tiempo, que se acabó con desventaja mínima y eso daba la oportunidad de intentar encontrar alguna solución durante el descanso.

No pasó inicialmente por variaciones en el once porque no hubo cambios en la reanudación aunque el equipo sí tenía más personalidad con el balón tratando de moverlo más rápido para intentar solventar las continuas ayudas defensivas de la Cultural. Pasado un cuarto de hora sí que movió el banquillo Llácer, justo después de que se reclamara un posible penalti sobre Imanol Baz del que el colegiado se desentendió.

Intentaba cercar el área de Bañuz con más empuje que ideas claras y el problema estaba en las contras de la Cultural que llegaba en más de una ocasión con clara superioridad aunque no resolvía bien lo que le al menos corría en favor de la emoción de la recta final del encuentro porque ya nadie parecía tener el control. Y decimos parecía porque bastó un buen movimiento ofensivo de la Cultural para que consiguieran cerrar el duelo a diez del final.

Una acción desde la derecha, con apertura a la izquierda para el avance del extremo que la puso al corazón del área donde el casi recién entrado Artola chutó sin controlar y nada pudo hacer Iván Martínez.

Quedaba un tiempo y como Unionistas nunca se rinde estuvo a punto de obrar un milagro porque primero empató, después de rematar un balón suelto Baz, y en la prolongacióntuvo un cabezazo para empatar el duelo aunque el esférico no quiso sonreir a los de Salamanca y se marchó fuera.