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Los códigos QR que 'hablan' llegan a las marquesinas para ayudar a los pasajeros con problemas de vista

Al usar la app correspondiente y pasar la cámara del móvil frente al QR, una voz informa sobre las líneas de bus que circulan por esa calle y el tiempo de espera

Los códigos QR que 'hablan' llegan a las marquesinas para ayudar a los pasajeros con problemas de vista
Código QR en una marquesina de Salamanca.
Daniel Bajo Peña
Daniel Bajo Peña
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Las marquesinas de Salamanca exhiben desde hace unos días unos llamativos vinilos de colores. Parecen elementos decorativos, pero en realidad son códigos QR diseñados especialmente para ser usados por personas con problemas de visión, porque son mayores, más vistosos y más sencillos de usar que un código QR normal. 

Los citados códigos forman parte del pliego de condiciones del contrato del servicio de autobús urbano. Según se recoge en éste, las paradas "dispondrán de sistemas de información de líneas y paradas para personas con dificultad de visión que demanden la misma a través de su mando a distancia o sistemas Bluetooth, en su caso, tanto en las paradas dotadas de SAE (Sistema de Ayuda a la Explotación) como en el exterior de los autobuses, junto a la puerta de acceso, así como en el interior de este para informar de la próxima parada".

El Ayuntamiento aún no ha desvelado todas las posibilidades de los códigos, pero éstos ya están activos y pueden consultarse, al menos parcialmente, usando la aplicación para móviles NaviLens. 

Los códigos NaviLens se activan pasando la cámara del móvil por delante, incluso sin enfocar. Inmediatamente, una voz informa al usuario sobre la calle en la que está, el número de la parada, las líneas que circulan por allí y el tiempo de espera hasta que pase el siguiente autobús. La aplicación también puede emitir sonidos para orientar al usuario hacia la etiqueta e indicarle la distancia a la que se encuentra, de forma similar a los altavoces de los pasos de peatones.

Según la web de la compañía desarrolladora "las personas con discapacidad visual tienen dificultades para utilizar la señalética tradicional y por tanto no pueden ser autónomos en entornos desconocidos", algo que estas pegatinas tratan de remediar en la medida de lo posible.

Servicios de transporte de ciudades como Murcia, Barcelona, Madrid o Nueva York ya usan estas pegatinas. Varias empresas de alimentación también los han incluido en las cajas de sus productos.