Salamanca rinde homenaje a la figura de Ramón y Cajal y "a su gran herencia" científica e investigadora

Salamanca rinde homenaje a la polifacética figura del médico y científico Santiago Ramón y Cajal, Premio Nobel de Medicina en 1906, y "a su gran herencia". El Teatro Liceo será escenario este miércoles, día 10, de la jornada 'Salamanca: por Cajal y la ciencia' que "reunirá a prestigiosos ponentes e investigadores", tal y como explicó en su presentación el concejal de Educación, Luis Sánchez, acompañado de la vicerrectora de Ciencias de la Salud y Asuntos Sociales de la USAL, Ana María Martín Suárez; la vicerrectora de Investigación y Transferencia de la UPSA, Ana María Fermoso; y los científicos Adolfo García Sastre y Ana Fernández-Sesma.

Una jornada que también cuenta con la colaboración de la Fundación Ramón Areces, el Ministerio de Cultura y una veintena de sociedades científicas y de reconocido prestigio. Asimismo, la jornada cuenta como presidentes de honor con María Urioste Ramón y Cajal, Marquesa de Ramón y Cajal, título póstumo que recibió su bisabuelo, y Andrés Chordi, doctor en Medicina y Catedrático de Microbiología y, entre otros reconocimientos, Premio Santiago Ramón y Cajal 1969 y Medalla de Oro de la Universidad de Salamanca.

La personalidad y la obra de Santiago Ramón y Cajal, el padre de la Neurociencia moderna, serán desgranadas en "una jornada científica de especial interés". "Cajal fue un hombre excepcional, un genio que dominó muchas disciplinas". Fundador de la neurociencia, "también cultivó otros campos como la epidemiología o la bacteriología", apuntó la vicerrectora de ciencias de la Salud y Asuntos Sociales de la USAL, Ana María Martín Suárez.

Ramón y Cajal se interesó por la naturaleza, la pintura y fotografía, el ajedrez, la escritura, la medicina, la investigación y la gestión educativa y científica, "poniendo los cimientos de instituciones tan importantes hoy en día como el CSIC (Centro Superior de Investigaciones Científicas)". "Su figura y su obra es tan universal que no solo da nombre a calles y plazas en numerosas ciudades, sino que hasta un cráter de la luna y un asteroide llevan su nombre".

Por su parte, la vicerrectora de Investigación y Transferencia de la UPSA, Ana María Fermoso, destacó "su calidad como maestro, creando escuela". "Para la universidad no puede existir mejor referente, un ejemplo a seguir, como científico y como humanista, añadiendo que Ramón y Cajal puso a la investigación española en la vanguardia internacional y además puede ser considerado como uno de los padres de la inteligencia artificial" por su estudio de las conexiones neuronales.

Ana Fernández Sesma, Catedrática y Directora del Departamento de Microbiología de la Facultad de Medicina Icahn del Hospital Monte Sinaí de Nueva York, inició su intervención recordando su paso por la Facultad de Biología de la USAL. "Salamanca es mi casa", apuntó. "Me gusta presumir de que mi universidad tiene 800 años. En referencia a la jornada dedicada a Ramón y Cajal destacó que como científico universal puso a España en el mapa. La ciencia es universal y eso no los demuestra Cajal".

Por su parte, el científico Adolfo Sastre, que estudió en la USAL y donde también hizo su doctorado en Bioquímica y Biología Molecular, actualmente es profesor en los Departamentos de Microbiología y Medicina, y en el Centro del Cáncer Tisch de la Escuela de Medicina Icahn del Hospital Monte Sinaí. "Venir a Salamanca despierta muchas emociones. De Ramón y Cajal había estado un poco olvidado lo que hizo por la ciencia en España, siendo uno de los impulsores de la estructura de la formación investigadora en nuestro país. Ahora mismo hay un gran programa de formación de personal investigador, y los investigadores españoles pueden competir con otro cualquier otro lugar del mundo".

La inauguración tendrá lugar a las 9.30 horas, y a lo largo del día tendrán lugar 40 ponencias, de unos diez minutos de duración cada una, en varios bloques temáticos: Origen del sabio y valores, aficiones y neurociencias, investigación traslacional y presente y futuro. La jornada está abierta a todos los interesados en la ciencia, la investigación y en la figura de Ramón y Cajal, pero también a la ciudadanía en general –con entrada libre hasta completar aforo- y a los escolares de diferentes centros educativos que acudirán al Teatro Liceo durante la mañana. Aquellos interesados en acudir pueden inscribirse previamente, y además de recibir un diploma de asistencia se les entregará libro recopilatorio de la jornada editado por Ediciones Universidad de Salamanca.

La jornada también se puede seguir a través de la web https://santiagoramonycajal.org/

Aquí puedes consultar el programa completo: Salamanca: por Cajal y la ciencia

Santiago Ramón y Cajal

Santiago Ramón y Cajal (1852-1934) es reconocido como el fundador de la neurociencia moderna. Estudió medicina en la Universidad de Zaragoza y se especializó en histología y anatomía patológica. Aunque se convertiría en uno de los científicos más importantes de la historia, también destacó por su brillante faceta artística. El dibujo y la fotografía fueron sus grandes pasiones. Dichas inquietudes fueron fundamentales para su formación y desarrollo científico, ya que a través de dibujos de alta calidad artística fue capaz de ilustrar la anatomía del sistema nervioso.

Una de sus mayores aportaciones científicas ha sido la conocida Doctrina de la neurona, que sostiene que el sistema nervioso está formado por entidades especializadas e independientes que se comunican entre sí, las neuronas. La principal dificultad a la que se enfrentó esta teoría fue la incapacidad de visualizar claramente las células dentro de la gran complejidad del sistema nervioso. A pesar de ello, superó las adversidades de su época, y gracias a la técnica de Golgi, logró visualizar las neuronas como unidades individuales, como elemento fundamental para entender la estructura cerebral. Por ello, fue galardonado con el Premio Nobel en Fisiología y Medicina en 1906.

A través de sus reconocidas obras literarias, trató de transmitir los principales valores que tanto le ayudaron en sus inicios como investigador: la independencia mental, la perseverancia en el trabajo y la curiosidad intelectual. En definitiva, que "toda obra grande es el fruto de la paciencia y la perseverancia, combinadas con una atención orientada tenazmente, durante meses y años, hacia un objeto en particular".

Fue un polímata que se interesó por la Naturaleza, la pintura y fotografía, el fisicoculturismo, el hipnotismo, el ajedrez, la escritura, la medicina, el pensamiento crítico, la investigación y la gestión educativa y científica. Además de ser uno de los científicos más relevantes y revolucionarios de la ciencia mundial, fue también un ser humano excepcional. Su figura como universitario y ciudadano ejemplar contribuyó a prestigiar la imagen de los españoles en todo el mundo. Cajal sigue vivo en el inconsciente colectivo universal, para animar al mundo a seguir la senda del conocimiento, la Ciencia, el desarrollo humano y tecnológico, con el elevado propósito de hacer un mundo mejor, más próspero, solidario y armonioso.