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Recuperar el tren Salamanca-Plasencia costaría unos 1.000 millones de euros

La plataforma Corredor Oeste ha diseñado la ruta y calculado el precio de un trayecto entre ambas ciudades

Recuperar el tren Salamanca-Plasencia costaría unos 1.000 millones de euros
Daniel Bajo Peña
Daniel Bajo Peña
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La asociacion Corredor Oeste Ruta de la Plata ha diseñado un posible trazado para la conexión Salamanca-Plasencia, el 'nudo gordiano' de una hipotética reapertura de toda la conexión norte-sur, desde Asturias hasta Sevilla.

Un grupo de ingenieros "que lleva unos meses colaborando con nosotros" se ha encargado de plantear una ruta factible y de tasar incluso los costes de construcción. Según sus conclusiones, el trazado Salamanca-Plasencia costaría en torno a 1.000 millones de euros, inspirándose en un estudio previo elaborado por la Junta de Extremadura que estimaba una inversión de 900 millones.

La propuesta de Corredor Oeste, acotado al segmento entre Salamanca y Plasencia, prevé usar la salida sur de Salamanca (incluyendo el puente sobre el Tormes) hasta la antigua bifurcación La Serna.

En rojo, la ruta planteada por la plataforma Corredor Oeste.

El tramo de Salamanca al río Cuerpo de Hombre (Béjar) sería "nuevo en su mayor parte, siguiendo el corredor de la autovía A 66 (para minimizar el impacto ambiental y el recorrido) cruzando el rio Cuerpo de Hombre en Béjar con un nuevo viaducto paralelo al de la A66 en la cota más alta de este".

Una vez pasado Bejar, con rumbo a Casas del Monte "se aprovechará el trazado existente con mejoras puntuales del radio, mejora del peralte y dotación de apartaderos diseñados para agregar/segregar la doble tracción por cola a los trenes de mercancías". Finalmente, para llegar a Plasencia "se aprovechará el trazado actual con mejoras del radio de curva y disminución de rampas y pendientes". Ésta sería la parte más económica del proyecto.

El diseño de Corredor Oeste incluye unas prestaciones con velocidades máximas "del orden de 230-250 km/h para trenes de viajeros; y vías de apartado de hasta 1.050 metros útiles para los trenes de mercancías, con rampas adecuadas para los tráficos que se prevea que se puedan encaminar por ella". En su informe prevén que los primeros tramos podrían entrar en servicio en 2030 y la ruta íntegra, en 2033.