Ya estamos en la jornada 25 de Liga y Unionistas de Salamanca, en su carrera de fondo por asegurar cuanto antes la salvación, afronta una salida a Tarazona que se plantea como una nueva prueba de la capacidad de adaptación al entorno del equipo de Dani Ponz a distintos rivales y contextos. Después de dos visitas complicadísimas ante equipos llamados a luchar por el ascenso directo, y un partido en casa ante un rival que llegaba con piel de cordero tapando su verdadero potencial, ahora toca cambiar de fórmula y como buen camaleón encontrar la mejor forma para enfrentarse a un adversario en apuros como el Tarazona.

Cualquiera que siga una categoría como la Primera RFEF sabe lo difíciles que son los partidos en las segundas vueltas y como equipos que están en apuros clasificatorios se hacen especialmente fuertes cuando juegan en su feudo. Ese podría ser el caso del equipo aragonés que además ha vivido como local un año extraño porque tuvo que empezar la campaña jugando en el exilio mientras se acondionaba su feudo y eso jugó en su contra. Ahora busca recuperar terreno perdido y en el Polideportivo Municipal de Tarazona puede complicar mucho la vida a los rivales.

Aunque hace tiempo que no visita este terreno de juego, Unionistas sí que jugó allí en el pasado -durante la fase de ascenso a Segunda B en 2018-, y cualquiera que estuviera sabe que se va a encontrar un campo de dimensiones no muy grandes en el que el balón parado puede ser importante y en el que los despistes salen caros de manera que tocará echar mano de la versión más intensa que pueda sacar el equipo.

Ponz ya avisó en la previa que por las características del rival, del campo y también, por cómo están sus propios jugadores, -"de categoría", lo calificó-, habrá variaciones en el once respecto al que jugó ante el Fuenlabrada. "No vamos a repetir el once porque tampoco tiene que ver el contexto y porque siempre pensamos que podemos mejorar, siempre somos inconformistas siempre teniendo en cuenta la alegría y los registros muy buenos que tuvimos el otro día", apunta el técnico reconociendo que ante el equipo madrileño se vio una muy buena versión de Unionistas.

Queda abierto el once por lo tanto a quinielas con la única seguridad de que no optan a él las bajas: Losada, Ekaitz y Dani Nieto, mientras que vuelve a tener opciones tras su vuelta Rastrojo aunque sobre él Ponz dijo que no está para los noventa minutos. Es tal la confianza que el técnico tiene en la respuesta que le pueden dar todos sus futbolistas ahora mismo que incluso abre la puerta a cambios en la portería porque "la situación de la portería la pensamos todas las semanas ya que los dos están a un nivel brutal, con un trabajo brutal de ambos y de Turi -preparador de porteros-, también".

Será un partido para aprovechar las ocasiones, una eficacia que ha mejorado en las últimas semanas y ante un rival como el Tarazona que, pese a su situación y partidos puntuales-, últimamente se mueve en marcadores bajos, es fundamental.

Para el Tarazona, que viene de ceder con claridad ante el Deportivo en un partido que rompió puntualmente la solvencia que venía mostrando atrás, la buena noticia es la recuperación de su delantero Cubillas tras cumplir su partido de sanción.

Partido correspondiente a la jornada 25 del grupo 1 de Primera Federación que se disputa el sábado 24 de febrero a las 20.00 horas en el Polideportivo Municipal de Tarazona y que será dirigido por Alberto Ávalos Martos, asistido por Marc Bondía López y Daniel J. Prat Hernández.