Entre el Valladolid de Segunda División y el Promesas de Segunda RFEF. Slavy (diminutivo cariñoso por el que le empezó a llamar de pequeño su madre), de tan solo 21 años, ha encontrado su lugar en Unionistas. Ejemplo de eso que se suele decir 'estar en el tiempo y en el lugar adecuado', la relación forjada es de beneficio mutuo. 

Él se define como un futbolista "muy técnico", con "destreza" para ir, "tanto al espacio como al cuerpo". "Me defiendo bien de espaldas y en el área soy un rematador de los 9 de antes que quedan pocos", señalaba. 

Sin embargo, más allá del discurso estándar de esas primeras presentaciones oficiales, Slavy confiesa haber congeniado desde un primer momento, tanto con Dani Ponz como con Rubén Andrés, sientiendo una "muy buena vibra" que le ha llevado aquí después de pasar por Huesca, Valencia y Valladolid. 

Pregunta. Primer partido de Unionistas, empate y sin gol. 

Respuesta. La pretemporada nos ha servido para coger sensaciones y patrones de juego que quería el míster. En el primer partido hemos demostrado lo que hemos trabajado, aunque nos faltara ese gol. Estoy seguro que si seguimos trabajando así eso caerá por su propio peso: acabaremos marcando. 

P. ¿Fue frustrante? 

R. Sí, claro. Estás dominando, asediando al rival en área contraria y ves que no entra, claro que te frustra, pero hay que pensar en positivo, soy positivo y en el próximo partido seguro que la enchufamos". 

P. Sensación mía, Dani Ponz estaba especialmente decaído en la rueda de prensa post partido, ¿también el vestuario?

R. Es cierto que fue algo inesperado, pero el fútbol es así, es impredecible. En el fútbol de una semana a otra las cosas pueden cambiar. Aunque nos haya sentado mal el empate nos debe servir como aliciente para seguir apretando. 

P. ¿Te sorprendió salir de inicio? 

R. No lo sé, no sé que decirte. Yo intento trabajar fuerte todas las semanas, ayudar al equipo y si estoy en el once dar todo lo que pueda. Estuve muy contento y seguiré trabajando. 

P. Con Losada como compañero arriba

R. Es importante complementarse bien, comunicarse bien... creo que en general estuvimos bien y el equipo se entiende bien. 

P. ¿Te sientes cómodo con esa forma de juego? 

R. Sí. En lo que estamos trabajando, el míster cuenta con dos arriba y la verdad que me siento muy bien jugando así. Estoy contento con esta idea. El equipo está unido y juegue quien juegue va a dar lo mejor de sí. El míster nos ha dicho que el que mejor esté será el que jugará y tiene que ser así. 

P. Y en calidad de cedido, ¿se siente el club de la misma manera?

R. Totalmente. Es cierto que vienes como cedido, pero este club es muy bueno, vengas como vengas, cedido o con contrato. El club nos ha demostrado una profesionalidad muy grande. 

P. ¿Ayuda tanta gente joven en la plantilla? 

R. La edad no es un problema. Nos llevemos cinco o seis años, seamos de la misma edad... estamos todos en la misma onda, no es un impedimento. Estamos muy bien proporcionados dentro del equipo. 

P. Entre el Valladolid de Segunda División y el Promesas de Segunda RFEF, Unionistas en Primera RFEF. Estás aquí porque tu proyección es hacia arriba y no hacia abajo. 

R. Sí, aunque yo voy día a día, semana a semana y partido a partido. No miro mucho a largo plazo. Solo pienso en salir al verde y hacerlo lo mejor posible. Creo que con trabajo y esfuerzo todo llega.

P. Ese 'todo llega', ¿qué significa?

R. Mi objetivo es ser futbolista. Estoy luchando desde muy pequeño para llegar a la élite, creo que estoy a un paso y en el sitio adecuado para llegar a hacerlo. 

P. Todo esto siendo desde 2002. 

R. Tengo 21 añitos (risas). Mi último año de universidad (estudia Magisterio en Valladolid, hasta ahora presencial, ahora únicamente podrá acudir los exámenes y hará las prácticas en Salamanca). 

P. ¿Tienes tiempo? 

R. Sí. Al final... las mañanas las dedicas a tu entrenamiento, a lo físico, pero las tardes las tienes libres y yo las dedico a formarme y a estudiar y creo que es muy importante. 

P. ¿Es un plan B?

R. Bueno, no sé si diría plan B, pero sí una manera de seguir formándome, de seguir teniendo una rutina y una vida ordenada, a lo que doy mucha importancia.