Partido de reencuentro tras el parón en Würzburg. Partido medicina. Partido para cuidar y mimar desde la grada a las "jugadoras que sí tienen compromiso", como el propio Roberto Íñiguez afirmaba al final del partido frente a Gernika, que suponía la tercera derrota de Perfumerías Avenida en liga. El entrenador de Perfumerías Avenida fue contundente en sus declaraciones y se vaticinan cambios, aunque mientras que desde fuera solo se pueden hacer suposiciones, lo que sí refleja la realidad es el apretado calendario del mes de diciembre.

Sin tiempo apenas para el descanso, el equipo azulón se enfrenta este domingo a partir de las 12:30 a Estudiantes, equipo que ocupa la novena posición de la tabla con un balance de cinco derrotas y cuatro victorias, pero competitivo en todos y cada uno de estos encuentros. Su último encuentro ganado, ante Tenerife, con un gran segundo parcial en el que rozó los 30 puntos y una mejor actuación de Fingall y Massey, nombres destacados del conjunto madrileño en esta primera parte de liga. 

Ahora bien, al margen del rival, los deberes de Perfumerías Avenida pasan por mejorar su versión individual trasladada al crecimiento como equipo. El parón poco ha cambiado a las de Roberto Íñiguez mentalmente hablando, faceta que más preocupa al margen del evidente cansancio físico por acumulación de partidos y trabajo. 

Se pudo ver ante el conjunto vasco, Avenida entra en caída libre anímicamente cuando las cosas no salen en ataque. No es capaz de recomponerse, de centrarse en defensa para pulir sus errores ofensivos. La confianza está claramente tocada y sin Silvia Domínguez no es lo mismo. 

Ahora bien, como no hay tiempo para descansar tampoco hay tiempo para lamentos. La montaña rusa tan pronto baja como sube y Würzburg suele ser la ubicación en la que el equipo más disfruta sobre el parqué. La confianza perdida la encuentra en el aliento de sus aficionados y un pequeña muestra se pudo ver el pasado viernes, 2 de diciembre, en el encendido navideño de El Corte Inglés. No tiene nada que ver con lo deportivo, pero la armonía y sonrisas que rodearon el evento alientan cualquier a cualquier árbol caído.

Los árbitros del encuentro son Germán Franciso Morales Ruiz, Eduard Colomer y Julio Rijo.