Victoria Martín, Carolina Iglesias, Henar Álvarez, Susi Caramelo, Inés Hernand o Martita de Graná (entre otros muchos) son nombres que aparecen por nuestra cabeza de manera instatánea cuando pensamos en mujeres dedicadas al humor y que han roto con todos los estándares establecidos hasta el momento en un mundo en el que unas pocas llegaban hasta donde muchos (hombres) ya estaban posicionados. Es fabuloso responder a Laura Sánchez Vegas de La Chocita del Loro con un lleno tras lleno por parte del podcast 'Estirando el chicle' o las miles de visitas con las que cuentan los videos de la humorista granadina, virales cada dos por tres. Tal directora llegó a decir en una entrevista para Cadena SER que “hemos pasado a un punto en que mucho del humor que hacen las mujeres es como de víctimas, de verdad. Víctimas o muy feminista”. Y señalaba, el “público variopinto no suele comprarlo". 

"Queremos poner el pie en la puerta para que pueda entrar más gente", decía en una entrevista Carolina tras ganar su primer Ondas a mejor podcast, pero al mismo tiempo señalaba que hay mucho por hacer. Dentro de esa lucha, y después de abrir muchas puertas, está Sara Benito Herrero. La salmantina reside actualmente en Madrid en busca de mayores oportunidades (porque ya sabemos como están las cosas por Castilla y León para los jóvenes) y actúa en la capital charra una vez al mes en el microabierto conocido como 'Salamancabra' celebrado en el bar 'Mano a mano'. Pocos espacios para muchos artistas, pero menos es nada y Sara analiza cuál es la situación y el papel de la mujer dentro del mundo del humor en Salamanca. 

¿Qué es el humor femenino? ¿Por qué tienen que tener ese apellido inmediatamente impuesto detrás? ¿Tiene género el humor? "No sé responder a la pregunta cuando me la hacen. Es cierto que parece que se divide: humor masculino y femenino; pero bajo mi punto de vista no tiene género. Que lo haga una mujer o un hombre... se puede hablar de lo mismo. En la actualidad, creo que las cosas están cambiando. Y cambian por ejemplo en que los hombres siempre han tendido a hablar de sexo, de porno, de las pajas que se hacen... se ha evolucionado. Nosotras, por otro lado, tenemos que escuchar que solo hablamos de regla, ¿y por qué no? es lo que nos pasa, pero también tratamos otros detalles de nuestro día a día, el más insignificante puede tener muchísima gracia. El humor no tiene género", reitera. 

¿Es el humor creado por mujeres victimista? "No, me dan apuro las palabras de Laura. No sé en qué momento se le ocurrió decir eso y ejemplo de ello es cómo le está yendo a la Chocita del Loro. Esas palabras y que las diga una mujer... Somos todas compañeras y tenemos que apoyarnos. Es una opinión ridícula. Hay humores como personas que hay en el mundo", señala. 

A día de hoy no puedo vivir de ello, trabajo en otras cosas que van saliendo

Dicen que hay que abrir una puerta, ¿pero cuántas llevas abiertas ya? ¿Puedes vivir de ello? "Muchas (risas). Esto es como todo, tienes que trabajar un montón y estar trabajando 'a pico y pala'. Escribir, contactar con gente... para poder encontrar algún hueco. Es estar ahí todo el rato. Eso sí, a día de hoy no puedo vivir de ello, trabajo en otras cosas que van saliendo. En los micros abiertos no cobras, pero tienes que empezar así si quieres que se te conozca. En algún show... hay algo de dinero de por medio y tienes un cartel con tu nombre, pero dedicarte a ello... es persistir aunque no veas un duro", explica Sara.  

En concreto, en qué se centra tu trabajo y cuál es tu manera de trabajar. "Creo que depende del momento. Al final, la técnica se aprender, pero los textos los creas tú. Yo comencé con uno, pero ahora tengo bloques nuevos y me gusta centrarme en vivencias mías; sobre lo que pasa y lo que me ha pasado. También me gusta hablar de lo que vivo dentro de este mundo, las cosas que me han pasado con chicos dentro de los propios micros abiertos, tanto con presentadores como compañeros que hacían alguna que otra metida de pata. No se dan cuenta, pero es llamativo y me inspira para escribir. Son situaciones internas que no te esperas que piensas que no pasan, pero siguen pasando. Dan para mucho material", cuenta. 

¿Has soñado con que tu trabajo sea reconocido? "Sí y es mi ilusión. No sé en cuánto tiempo podrá ser, pero espero que más pronto que tarde. Me encantaría que esto saliera por algún lado. Que haya valido la pena todo el trabajo 'por la cara'", añade. 

¿Cómo es el público de Salamanca? "La primera vez tuve algo de miedo. No sabía qué público me iba a encontrar. Sin embargo, me llevé una gran sorpresa. Me acogieron muy bien y el humor se acoge muy bien. Estoy muy contenta con el abrazo de Salamanca", finaliza.