Javi Benítez llegaba a Salamanca con la intención de dotar a su equipo de la seguridad necesaria  bajo palos para afrontar el resto de temporada. Tras doce jornadas disputadas en las que el Salamanca había conseguido tan solo ocho puntos, situándose en la penúltima posición de la clasificación, debutó frente al Racing de Ferrol a domicilio y consiguiendo dejar la portería a cero, lo que supuso la posterior victoria de los blanquinegros. Javi, junto con el resto de jugadores que llegaron en el mercado de invierno, suponía savia nueva, renovación de sensaciones y ganas de hacer las cosas bien o por lo menos tener la actitud de intentarlo. 

¿Cómo es llegar a un club en la situación en la que estaba el Salamanca? "A nivel individual me lo propuse como un reto. Siempre he estado en equipos filiales y venir aquí suponía un cambio. No miré la situación en la que estaba el club, sino la oportunidad que suponía para mí. Sinceramente, creo que me he adaptado bien y afrontar el reto con la madurez y el potencial que puedo ofrecer, me hace ser feliz en el equipo y en el club", comienza a contar Javi Benítez, que a pesar de pensar en sí mismo, considera el interés del equipo como primordial: "Es obvio que cada jugador quiere lo mejor para sí mismo y quiere estar siempre al mejor nivel, pero si un equipo está unido y es una familia, cada uno de los jugadores de manera individual, será incluso mejor. Sin algo grupal, no puedes conseguir lo individual". 

Tras el encuentro frente al Racing de Ferrol, llegó su debut en el Helmántico, donde al margen del resultado (para olvidar), tiene un gran recuerdo: "Jugar en el Helmántico es espectacular, la verdad que me siento orgulloso de vivir siendo local y la forma en la que te arropa la afición...A pesar de las restricciones y la reducción del aforo se nota el calor de la grada y su ánimo. Para mí es una sensación increíble. Me lleva a ser más profesional". 

Una afición que espera deseosa la llegada de su máximo rival el próximo fin de semana al estadio Helmántico, a pesar de ser considerado por el club como un partido de ayuda al mismo. Ante este hecho, Javi Benítez asegura y pese a que ya ha vivido compromisos similares en Oviedo con equipos filiales, que se lo espera muy diferente a lo que ha conocido. "Tengo muchas ganas de poder vivir el derbi como un salmantino más, pero miro miro más por sacar el partido el partido adelante, que por jugar el derbi", reconocía. 

Se está viendo una de cara del equipo, que se sabía que estaba, pero que todavía no había llegado a relucir. 

Con el equipo en una situación complicada, ¿supone una motivación más este encuentro para responder ante la afición? "Como dice Lolo debemos ir partido a partido y siguiendo esta filosofía hemos mejorado con respecto a como estábamos hace unos meses. Noto al equipo contento e ilusionado. Se está viendo una de cara, que se sabía que estaba del equipo, pero que todavía no había llegado a relucir. Con la dinámica que tenemos, las ganas y la actitud vamos a echarle frente a cualquier equipo en cualquier situación. Es complicado saber que ya no puedes optar a algo mejor, pero somos realistas y trabajamos para cada partido", aclara. 

Se ha hablado de la palabra 'fracaso' alrededor del club por los altos objetivos establecidos por el propio club al principio de temporada y la no consecuención de los mismos, ¿se podría reducir en algo esa palabra y lo que ello implica? "Cada uno se establece sus propias etas, el equipo a partir de una serie de cambios ha tirado hacia arriba. No sé si es tarde o no, pero no nos hemos rendido. Mientras no nos rindamos, no será fracaso, porque le estamos echando...narices (risas)". ¿Qué hay que tener para ello? "Mente fría. Si solo piensas en la clasificación o haces cálculos, te vuelves la cabeza loca. Lolo nos calma y nos dice que tenemos que jugar cada partido como si fuera una final. Afrontarlo sin mirar nada más, hacer oídos sordos, solo pensar en el fin de semana, sacar tres puntos y ya se verá lo que pasa a posteriori". 

¿Dónde ves el futuro de tu equipo? "Prefiero ir partido a partido, pero también soy ambicioso y espero que estemos primeros en la clasificación en la que estemos. El equipo tiene una actitud de campeón. Es lo que veis, en cada partido, aunque sean equipos que van arriba, conseguimos que se hagan pequeños, les atacamos y eso denota la mejora". 

Un objetivo, que podría salvar al Salamanca CF, ya no del fracaso, pero sí de la catástrofe y el 'novato' del club tiene claro que lo harán en base al equipo: "Desde que he llegado he notado al equipo como una familia. Estamos remando todos en la misma dirección". 

Positivismo, frescura y seguridad...que de vez en cuando hace falta.