No era un partido cómodo el que tenía que afrontar Perfumerías Avenida en Logroño. Como penúltima cita de este 2020 tenía cita con un Campus Promete que llegaba al partido envalentonado por su reciente y clara victoria y con varias jugadoras en un evidente buen estado de forma y confianza. Por encima del resto su directora de juego Laia Flores y la pívot Diarra, jugadora que ha ido a más con el paso de las jornadas pero que ya en el primer partido ante el equipo salmantino creo problemas con su presencia física en la zona especialmente en control de rebote. Un encuentro además, en vísperas de una extraña Navidad, con todo lo que eso conlleva de posible 'despiste' pensando en dónde o cómo cenar y de hecho de ello alertaba en la previa Roberto Íñiguez.

Casi queriendo adelantarse a cualquier 'accidente' para prevenir a las suyas y ponerlas en alerta que fue como se las vio en la salida a la pista. Y es que aunque a Avenida le costó arrancar en ataque, más por lanzamientos escupidos por el aro que por malas decisiones, atrás sí se veía a un equipo salmantino con una idea muy clara de cómo trabajar. Muy encima de Flores y de Weaber, a la que se pegaba Lou Samuelson, e intentando ayudar sobre Diarra. Tampoco defendía mal Campus Promete y eso provocaba un marcador bajo y parejo, aunque Avenida ya conseguía que el equipo riojano enviara al limbo varias posesiones provocando pérdidas con su trabajo. 

Un triple de Lou Samuelson, el primero del equipo, ponía el +5 para Avenida que manejaba esa ventaja y tenía, ya avanzado el primer cuarto, la cuenta pendiente de evitar los rebotes ofensivos de Diarra. El equipo salmantino rozaba el +10 tras un 2+1 de Vilaró y una canasta sobre la bocina de Weaber dejaba los diez primeros minutos en un 10-18 con todo muy abierto. 

Promete trabajaba bien, cerrando el rebote e intentando correr, pero Avenida parecía saber que en algún momento podría desatar su tormenta ofensiva y siguió trabajando desde atrás. La tercera falta de Hof pudo suponer un problema cuando restaban cinco minutos de cuarto con 16-24 en el luminoso pero tras un tiempo muerto el equipo salmantino pareció 'tocar a rebato'. Dando una vuelta más de tuerca atrás, en ataque trabajaba para abrir espacios y poner el balón en manos de Hayes que aprovechaba su cambio de velocidad para anotar en penetración y llevar la diferencia por encima de los diez puntos. 

Ahora sí conseguía crear dudas en la defensa de Campus Promete y aceleraba la velocidad de balón en ataque parea sumar en dos buenas acciones con puntos de Karlie Samuelson y Cazorla. Abría hueco el equipo salmantino que además cerraba el cuarto con un triple de Lou Samuelson para un ya claro 24-41. 

El plan para Avenida pasaba por intentar calcar ese tramo final en la reanudación para intentar dejar resuelto el partido y lo hizo bien en el tercer cuarto pese a tener un problema que se mantuvo pendiente y es que Diarra seguía dominando en la zona y ante las faltas de Hof entraba Diallo en pista para intentar al menos buscar el desgaste físico de la center de Promete. En ataque Milic hacía daño desde el tiro de media distancia y Karlie ponía la máxima con un triple, 28-50, aunque Promete tuvo la virtud de irse en ese punto del partido y agarrada al poderío de Diarra llegó a un tramo final de cuarto en el que gracias a dos triples se animaba, 40-57. 

Promete se animaba e incluso amenazaba con ir a más pero ante la tentación de que las suyas cayeron en la tentación de relajarse con una ventaja de +16, Íñiguez pedía tiempo muerto para recordar que la intensidad no se negocia y las suyas regresaron a pista con un parcial de 0-8 a favor con triples de Lou Samuelson y Vilaró.

El equipo salmantino ya había llevado al límite a Campus Promete con su defensa presionante que lograba mantener con la rotación y la distancia entre uno y otro continuaba dilatándose.