El Club Deportivo Guijuelo ha dicho adiós a la Segunda RFEF cuando todavía quedan dos jornadas. Los blanquiverdes se jugaban absolutamente todo en casa, con el apoyo de los suyos, pero con el Numancia como rival. Parecía complicado poder mantener las esperanzas y, aunque el partido arrancó con ventaja local, los sorianos tardaron poco en demostrar su superioridad. No pudo lograrse la épica y el CD Guijuelo se despide de una categoría a la que aspirará a volver cuanto antes después de un año negro.

Todo arrancó de la mejor manera posible en el bando chacinero. En el primer minuto de partido la afición celebró el 1-0 en un pase filtrado al área que recibió Pana y que Moustapha, tratando de quitarle la pelota, mandó al fondo de su portería. La alegría llegó con fuerza al Municipal Luis Ramos, pero la burbuja explotó rápido. Guzmán la protegió un poco más con una gran parada a Sanchidrián, pero en el minuto diez se acabó todo.

El Numancia empató el choque en el 10' gracias a Asier Teijeira. Fue el 1-1 y los nervios llegaron a un bando local que era consciente de que debía ganar sí o sí para no descender, pero el miedo pudo más que la esperanza. Ezkurdia cometió un penalti y Jony marcó el 1-2 en el minuto 32. Todo estaba ya decidido.

Carmona quiso demostrar que el Guijuelo tenía cosas que decir y buscó el empate con un disparo al borde del descanso que se fue rozando el palo. Pero hasta ahí llegó el empuje chacinero y la segunda parte solo sirvió para continuar con el camino de la agonía. Jony rompió cualquier esperanza con el 1-3 en el 62' y Cristian Dieste aumentó la desventaja con el 1-4 en el 70'.

Al final, el 1-4 acabó siendo el clavo final de un ataúd en el que el CD Guijuelo ha ido metiéndose poco a poco durante la temporada. Un último golpe, en casa, que acabó rompiendo a una plantilla que llegó a creer con Rubén Gala pero que ha sido incapaz de acabar de dar la vuelta a un curso negro que acaba con el descenso a Tercera RFEF y dos jornadas todavía por delante.