La Policía Nacional ha detenido en la mañana del 21 de marzo a un hombre como presunto autor de un delito de agresión sexual.

El varón fue detenido el pasado 3 de marzo como presunto autor de un delito de agresión sexual y delito contra la intimidad, tras ser denunciado en Valladolid por una paciente a la que realizó tocamientos y grabaciones con su teléfono móvil en la consulta médica donde prestaba servicio.

Cabe destacar que el detenido ya contaba con antecedentes por hechos similares. En el año 2016, este médico fue condenado por un delito de atentado a la intimidad y de revelación de secretos tras grabar a una doctora en un vestuario femenino sin su consentimiento. En aquella ocasión, el Hospital Clínico de Valladolid abrió un expediente interno al detectar las grabaciones y trasladó lo sucedido a la Fiscalía. Finalmente, la investigación determinó que el condenado había grabado a una única víctima y, al no haber difundido las imágenes, se le impuso una pena de un año de prisión.

Tras su reciente detención el 3 de marzo, el Juzgado competente autorizó el estudio del terminal telefónico del arrestado, donde se encontraron diez vídeos con seis mujeres víctimas de hechos similares a los que motivaron su detención.

El pasado lunes 17 de marzo, una nueva víctima se presentó en dependencias policiales para denunciar por agresión sexual y delito contra la intimidad a este mismo sujeto. En respuesta, la unidad especializada intensificó la investigación para localizar su verdadero domicilio, ante el riesgo de fuga, logrando situarlo en Burgos.

En la mañana del 21 de marzo se llevó a cabo un dispositivo policial para su localización y detención, culminando con su arresto en Burgos como presunto autor de un delito de agresión sexual y delito contra la intimidad.

Tras su detención y con la autorización judicial correspondiente, se registró su domicilio en Burgos, donde se incautaron seis teléfonos móviles, dos discos duros, tres tablets, seis tarjetas de memoria, cinco ordenadores portátiles, dos cámaras de fotos, dos minicámaras y tres pendrives.

El detenido fue trasladado a dependencias policiales de Valladolid, donde se está llevando a cabo la investigación. En la mañana del sábado 22 de marzo, el detenido fue puesto a disposición de la autoridad judicial, que determinó su inmediato ingreso en prisión y decretó una orden de alejamiento sobre esta segunda víctima.

Una vez se obtengan las autorizaciones judiciales pertinentes, se procederá al análisis del contenido de todos los dispositivos incautados, sin descartarse la aparición de nuevas víctimas en relación con los hechos investigados.