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Una cadena humana pedirá en abril que se reabran al turismo los miradores de la presa de Almendra

Es una de las medidas de protesta convocadas contra el vallado que impide aparcar en los tres kilómetros y medio de coronación de la presa, la más alta de España

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Una cadena humana pedirá en abril que se reabran al turismo los miradores de la presa de Almendra
Presa de Almendra (Foto Iberdrola)
Isabel Andrés Rodríguez
Isabel Andrés Rodríguez
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Una cadena humana y mociones en los ayuntamientos son las próximas acciones con las que los vecinos del entorno de la presa más alta de España, la del embalse de Almendra, que se encuentra entre las provincias de Zamora y Salamanca, reclamarán que los miradores de esa infraestructura hidráulica se reabran al turismo, según informa EFE.

El conflicto surgió hace cuatro meses cuando Iberdrola alegó el cumplimiento de una normativa europea para vallar esos miradores e instalar bolardos que impiden desde entonces aparcar en los tres kilómetros y medio de coronación de la presa, según han informado a EFE este lunes fuentes de la Agrupación Europea de Cooperación Transfronteriza (AECT) Duero-Douro.

Esa agrupación ha canalizado las protestas con iniciativas como una recogida de firmas y ha movilizado a ayuntamientos y colectivos sociales de las comarcas salmantinas de Vitigudino y Ledesma y la zamorana de Sayago para pedir que se eliminen las vallas y bolardos.

La próxima protesta ciudadana está convocada para dentro de un mes, el próximo 12 de abril, cuando han programado una cadena humana en esos tres kilómetros y medio de muro que permiten visualizar a un lado un extenso pantano conocido popularmente como 'el mar de Castilla y León' y al otro un salto de agua de 202 metros de caída.

Bajo el lema 'Territorio vivo: seguimos aquí', se desarrollará esa cadena humana como acción de protesta pacífica que permita "alzar la voz y decir basta" a lo que consideran un "atropello" y una "apropiación del dominio público" y unos miradores existentes en una carretera autonómica que une esas dos provincias cerca de la frontera con Portugal.

El director general de esta agrupación, José Luis Pascual, ha señalado que no van a permitir que se les de "un trato discriminatorio que pretende aislarnos y que puede agudizar la despoblación en la zona, al cerrarse al turismo esos miradores".

Con la colocación del vallado de dos metros de altura, según ha denunciado, "se impide que las personas puedan disfrutar de las excepcionales vistas desde la presa y han acabado con el que ha sido durante 55 años un observatorio privilegiado para contemplar la belleza del río Tormes a su paso por el parque natural Arribes del Duero", concluye EFE.