Tendrá un precio base de licitación de 32.035 euros
Dicen que a la tercera va la vencida, y el Real Ávila (2ª RFEF) se lo ha tomado este jueves al pie de la letra al echar al Real Oviedo (LaLiga Hypermotion) de la Copa del Rey en el partido de primera ronda disputado en el Estadio Municipal Adolfo Suárez.
A la tercera, porque era la tercera vez que ambos conjuntos se veían las caras en este siglo después de que los carbayones eliminaran a los abulenses en dos fases de ascenso a la entonces 2ªB, en la 2003-2004 y la 2004-2005. A la tercera, porque el desenlace tuvo que esperar al tercer acto, los penaltis, después de que nadie consiguiera perforar la portería rival en 90 minutos de partido y 30 de prórroga. Y a la tercera, porque tres fueron los penaltis fallados por el Real Oviedo y tres los marcados por el Real Ávila -Alberto Martín, Adri Carrión y Mario Rivas- para llevarse el partido y el pase a la siguiente ronda.
Aunque a priori pudiera parecer un duelo desigual, como la mayoría de los que se dan en la primera ronda de la Copa del Rey, la verdad es que el desenlace pudiera haberlo intuido cualquiera durante el desarrollo del partido porque sobre el césped del Estadio Municipal Adolfo Suárez no se vieron categorías.
Es cierto que al Oviedo se le vio más equipo, pero también que el Ávila no se amilanó en ningún momento y supo jugar durante 120 minutos de tú a tú a todo un Segunda División que quizá subestimó a los encarnados sacando un once plagado de suplentes que en los primeros minutos se vio superado por los locales, que asustaban con llegadas de Alberto Martín y Mario Rivas. Superado el susto inicial los asturianos se hicieron con el control del balón pero tampoco enseñaron los dientes demasiado, deparando una primera parte con mucha igualdad y pocas ocasiones.
En el comienzo de la segunda mitad el susto lo puso de nuevo el Real Ávila en una clara ocasión de Alberto Martín, que se quedaba solo frente al portero y no conseguía regatearle. Eso fue suficiente para que el entrenador del Oviedo, Javi Calleja, tomara cartas en el asunto con un triple cambio que antes de la hora de juego daba entrada a Lemos, Colombatto e Ilias por Masca, Hassan y Lópes en el inicio de una dinámica de sumar titulares sobre el cesped.
No se inmutó de primeras el Ávila, que también había cambiado a Fer Díaz por Adri Carrión, y que dispuso a continuación de dos claras ocasiones para adelantarse en el marcador en dos centros que salieron de las botas de Campos, desde la derecha, y que no acertaron a convertir Alberto Martín primero y Mario Rivas después. Sí apretaron entonces los visitantes, que por espacio de 10 minutos consiguieron cercar a los abulenses con peligrosas llegadas de Cardero, Ilias y Jaime Vázquez que terminaron en las manos de Álvaro.
Los últimos minutos del tiempo reglamentario fueron un quiero y no puedo para los ovetenses, que no supieron aprovechar su superioridad física ante un cuadro local agotado y que incluso estuvieron a punto de perder el partido en el 89 cuando el abulense Adri Carrión se sacaba un centro desde la derecha que remataba a bocajarro Caio López para el despeje del guardameta. Mismo guión para una prórroga con varios jugadores encarnados con problemas físicos de los que el Oviedo no supo sacar partido.
Al final la lotería de los penaltis le tocó al Real Ávila de pleno. Álvaro paró el primer lanzamiento asturiano y los dos siguientes se fueron a las nubes, mientras que los de Miguel de la Fuente hacían su trabajo y lo convertían todo para seguir en la Copa del Rey, al menos una ronda más.
La victoria del Real Ávila hizo entonces estallar a un Estadio Adolfo Suárez que llenaban 3.000 almas -500 llegadas desde Oviedo- y que espera ya rival para la siguiente ronda, que se disputará presumiblemente en la primera semana de diciembre.
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