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¿Qué significa diversificar las inversiones?

Concentrar las inversiones en un único activo o tipo de activo puede aumentar el riesgo de pérdidas significativas si ese activo no rinde como se espera

¿Qué significa diversificar las inversiones?
V.T.P.C
V.T.P.C
Lectura estimada: 4 min.

Diversificar las inversiones es una estrategia financiera que consiste en repartir el capital de un inversor entre distintos tipos de activos para reducir el riesgo global de la cartera. El principio básico de la diversificación es que no se debe "poner todos los huevos en la misma cesta". Concentrar las inversiones en un único activo o tipo de activo puede aumentar el riesgo de pérdidas significativas si ese activo no rinde como se espera.

El objetivo principal de diversificar las inversiones es minimizar el riesgo sin sacrificar en exceso las oportunidades de beneficio. Cada clase de activo o mercado puede comportarse de forma diferente en función de las condiciones económicas, los ciclos del mercado y otros factores externos. Por tanto, al tener una cartera diversificada, es más probable que si un activo sufre pérdidas, otro pueda compensar esas pérdidas con ganancias, ayudando a estabilizar el rendimiento total de la inversión.

Cómo diversificar una cartera de inversiones

Hay distintas formas de diversificar una cartera de inversión. El enfoque adecuado depende de tus objetivos, tolerancia al riesgo y horizonte temporal de inversión.

Diversificación por clase de activos

Una de las formas más comunes de diversificación consiste en repartir las inversiones entre distintas clases de activos. Por ejemplo, las acciones, que representan la propiedad parcial de una empresa, pueden ofrecer el potencial de mayores rendimientos a largo plazo. Sin embargo, también conllevan un mayor riesgo de volatilidad.

Otro ejemplo es invertir en ETFs. Ésta puede ser una forma accesible de diversificar tu cartera, ya que estos fondos siguen el rendimiento de índices, sectores o activos específicos. Cuando compras un ETF, adquieres una pequeña parte de un grupo de activos, como acciones, bonos o materias primas. Los ETFs se negocian en bolsa como las acciones:  pueden comprarse y venderse en tiempo real.

También están los bonos, que son instrumentos de deuda emitidos por gobiernos o empresas. Los bonos suelen ser menos volátiles que las acciones y a menudo proporcionan unos ingresos fijos mediante el pago de intereses, lo que puede hacer que sean una opción más estable. Las inversiones inmobiliarias pueden ofrecer ingresos pasivos y revalorización del capital, pero también pueden ser menos líquidas que otros activos. Mientras que las materias primas -que incluyen activos como el oro, el petróleo y productos agrícolas- tienden a comportarse de forma diferente a las acciones y los bonos, lo que las convierte en otra opción para diversificar tu riesgo.

Cada una de estas clases de activos responde de forma diferente a los cambios económicos.

Diversificación geográfica

Invertir en diferentes regiones o mercados internacionales es otra forma de diversificación. Los mercados de distintos países o regiones no siempre se mueven al mismo ritmo o en la misma dirección. Por ejemplo, una recesión en Estados Unidos no afectará necesariamente de la misma manera a los mercados asiáticos o europeos.

Incluir inversiones en mercados internacionales puede permitirte aprovechar las oportunidades de crecimiento global y reducir el riesgo asociado a los acontecimientos locales. Además, los factores políticos, normativos y económicos varían de un país a otro, por lo que la diversificación global puede proporcionar protección contra los riesgos asociados a una sola economía.

Diversificación sectorial

Dentro del mercado de renta variable, la diversificación puede lograrse invirtiendo en distintos sectores de la economía, como la tecnología, la energía, la sanidad, los bienes de consumo o el sector financiero. Los sectores suelen tener ciclos de crecimiento y contracción que no siempre coinciden. Por ejemplo, el sector tecnológico puede estar en auge mientras el sector energético está en declive.

Diversificando por sectores, los inversores pueden protegerse de la posibilidad de que un solo sector atraviese dificultades. Si un sector sufre una recesión, otros pueden estar creciendo y ayudar a compensar las pérdidas.

Diversificación temporal

La diversificación no sólo tiene que ver con los tipos de activos o sectores, sino también con el momento de las inversiones. Realizar inversiones de forma regular a lo largo del tiempo, en lugar de hacer una gran inversión en un momento dado, puede reducir el riesgo de comprar en el peor momento, por ejemplo, justo antes de una caída del mercado. Esta estrategia, conocida como dollar-cost averaging, permite suavizar el impacto de la volatilidad del mercado.

Este artículo ha sido redactado en colaboración con la plataforma de inversión DEGIRO.

La información de este artículo no se ha redactado con fines de asesoramiento, ni pretende recomendar ninguna inversión. Ten en cuenta que los hechos pueden haber cambiado desde que se escribió originalmente el artículo. Invertir conlleva riesgos (por ejemplo, volatilidad de precios, divisas o liquidez). Puedes perder los fondos invertidos. Ten en cuenta tus conocimientos y experiencia a la hora de tomar decisiones de inversión. Los resultados pasados no son un indicador fiable de los resultados en el futuro. Los mercados son volátiles y pueden fluctuar significativamente en función de acontecimientos económicos, políticos, normativos o de otro tipo.