¿Por qué Rusia inicia una guerra contra las VPN?

Seguramente habrás escuchado en las noticias que Rusia ha intensificado masivamente sus esfuerzos por controlar y censurar el acceso a internet. Dentro de estas prohibiciones se encuentran el bloqueo del uso de servicios específicos de VPN. Pero ¿por qué Rusia ha iniciado una campaña tan agresiva contra estas herramientas?

Motivos detrás de la represión de las VPN en Rusia

Uno de los principales motivos que existen detrás de esta represión de las VPN en Rusia es que su gobierno quiere controlar el acceso a la información por parte de los ciudadanos. Desde el año 2017, con la presidencia de Vladímir Putin, se comenzaron a implementar leyes específicas que prohíben el uso de tecnologías que permitan el acceso a contenido bloqueado por su gobierno. Así, esta restricción no sólo afecta al uso de las VPN, sino que también a otros métodos como los proxies o navegadores privados.

Según la información oficial, el motivo por el que se prohíbe el uso de estos métodos es el evitar que se acceda a ese contenido que es considerado ilegal. En un inicio se habla de contenido igual extremo o delicado, pero realmente la censura se extiende a todo el contenido que el gobierno ruso considere que va en contra de sus propios intereses.

Aislamiento digital y control social

Tanto para los activistas como para los usuarios que quieren acceder a información que prohíbe su gobierno, las VPN han sido una herramienta clave para ellos. Y más allá del control propio de la información, esta campaña de prohibir el uso de una VPN hace que la población rusa se vea aislada del mundo. Debido a ello, los usuarios rusos no pueden conectarse a plataformas o a redes sociales extranjeras. Eso, junto con el hecho de localizar la IP y conocer la ubicación de cada usuario hace que haya un control social y aislamiento digital.

¿Cuáles son las medidas y tácticas empleadas por Rusia?

Para evitar que los usuarios accedan a esa información censurada, el gobierno ruso comenzó a bloquear los servicios de VPN. Desde la agencia de supervisión de comunicaciones en Rusia, Roskomnadzor, se bloqueó el acceso a los servicios más populares de VPN tanto para las empresas como para los usuarios particulares. Por lo tanto, cualquier empresa que desee estar en Rusia deberá de cumplir con esta normativa y no hacer uso de una VPN para que así se pueda localizar su IP.

Evidentemente, para conseguir lo anterior, el gobierno ha ejercido presión sobre las empresas tecnológicas, como Apple y Google. Todo ello con el objetivo de que eliminen las aplicaciones de VPN de sus tiendas en Rusia. Varias de estas empresas han cedido a la presión eliminándolas de sus plataformas, lo que hace aún más difícil para los usuarios en Rusia descargar estas aplicaciones. Las empresas de VPN que aún siguen operando en Rusia lo hacen bajo la regulación del propio gobierno que les indica específicamente lo que pueden hacer y lo que no. Debido a ello, la gran mayoría de empresas de VPN han dejado de operar en el país ruso.

¿Cuál es el futuro de la represión de las VPN en Rusia?

Está claro que la represión y censura en Rusia son un gran problema para la libertad de sus ciudadanos. El decidir limitar el acceso a estas herramientas hace que el gobierno pueda monitorear todas las actividades en línea de los usuarios. Además, por supuesto, al localizar la IP se sabe exactamente su ubicación y ciertos datos personales. Como consecuencia, los usuarios tienen una restricción muy grande no sólo de información sino también de comunicación a través de redes sociales. Esto aumenta el control del estado sobre la vida digital de los rusos y reduce su capacidad para ejercer su libertad de expresión y acceder a la información libremente​.

Para las comunidades internacionales, esta acción es realmente preocupante. Se tratan de medidas que atacan de forma directa la libertad de expresión y los derechos humanos. Así, organizaciones de derechos digitales y ciertos gobiernos han criticado las políticas impuestas por el gobierno ruso. Sin embargo, la situación a día de hoy sigue igual y aún es bastante incierto cómo será el futuro digital en Rusia.

En conclusión, la guerra de Rusia contra las VPN es parte de una estrategia más amplia para controlar la información y reprimir la disidencia en línea. A medida que el gobierno ruso intensifica su represión, el acceso a herramientas como las VPN se vuelve cada vez más crucial para aquellos que buscan preservar su privacidad y libertad en el entorno digital.