La exquisitez de Talavante, el poderío de Roca Rey y la torería de Pablo Aguado conquistan La Glorieta

Los salmantinos volvieron este viernes a La Glorieta para disfrutar de una de las corridas estrella de la Feria Taurina que este fin de semana llegará a su fin. En el cartel anunciados Alejandro Talavante, Roca Rey y Pablo Aguado, la plaza a reventar y a punto de colgar el 'No hay billetes' a pesar de la lluvia.

Con puntualidad arrancaba el paseíllo más esperado, expectación máxima en los tendidos, arropados por paraguas y chubasqueros los aficionados que pusieron el color a una tarde gris.

De toriles salió el primero de la tarde para Talavante que acumula seis Puertas Grandes en esta plaza. 'Amoroso' de nombre, herrado con el número 87, de 502 kilos. Castaño, meano, escaso de presentación. Tocado de encornadura no permitió lucimiento con el capote. Manseó en banderillas complicando el tercio. 

Andarín, soltando la cara con brusquedad. Al final sacó fijeza y movilidad en una faena de menos a más. Lo cuajó el torero al natural, una de las mejores manos izquierdas del momento. Muy meritoria la última tanda por el pitón derecho, el menos potable del animal. Pinchazo y estoconazo de efecto fulminante. Ovación. 

En segundo lugar salió al ruedo 'Marxista', herrado con el número 5, de 469 kilos de peso. Negro, bajito de manos, rabilargo, anovillado, astifino al que paró a la verónica en los terrenos del 8 Andrés Roca Rey. Empujó en el caballo y complicó también en banderillas. Planteó el peruano una labor muy inteligente dándole ventaja al toro, llevándolo muy largo en los inicios para exprimirle la condición. Se centró en el último tercio tomando la muleta por abajo.

Se fue apagando el toreo y sacando genio al enganchar la franela, con ese toreo estático y poderoso... Roca Rey puso a todo el mundo de acuerdo. Metido entre los pitones pinchazo y estoconazo que rodó sin puntilla. Fuerte petición. Ovación para el torero y pitos para el presidente. 

'Pujil', herrado con el número 112, de 531 kilos. Castaño, listón, bocidorado, más serio que sus hermanos. Muy tocado hacia arriba de encornadura se quedaba corto en el capote que manejó al natural Pablo Aguado de forma sublime. Tras el puyazo le recetó un quite por delantales rematado con dos medias de cartel. Los subalternos fueron abrigados a desmonterarse en el tercio de rehiletes. Bravo el de garcigrande pero con muchas 'teclas' que tocar. Le fue dando forma el sevillano dejando su sello que tanto cautiva a los aficionados, en un toreo lento, enroscándose el toro a la cintura con la figura siempre encajada tan difícil de conseguir. 

Se apagó pronto el toro y empezó a defenderse y se fue a por el acero. lo enterró hasta los gavilanes. Oreja.

En cuarto lugar salió de toriles 'Querido', herrado con el número 2, de 506 kilos de peso. Negro, hondo muy serio y corniveleto. Salió suelto en el primer tercio. Muy alegre en banderillas y atento a todo lo que pasaba galopó alocadamente por todo el ruedo. Brindó al público Talavante para poner orden al desconcierto anterior. Con esa magia y variedad que le caracteriza le formó un lío por ambos pitones a un bravo astado que tomaba la muleta con mucha codicia y arrastrando el hocico, virtudes que no demostró el toro en los primeros tercios. La faena cogió vuelo entre trincherazos, molinetes y ligadísimas tandas con mucha transmisión en los tendidos por la forma tan vibrante de embestir y cuajarlo de pitón a rabo. Pinchazo y estocada. Dos orejas y vuelta al ruedo al toro. 

En quinto lugar salió 'Comandante', herrado con el número 71, de 493 kilos de peso. Castaño claro, bocinegro, tocado de encornadura y muy distraído. Salió suelto de un lado hacia otro, complicando mucho los primeros tercios. Toro difícil de fijar en la muleta que se arrancaba, al que había que tragarle mucho y dejarle la muleta puesta porque se marchaba a la puerta de arrastre. Apostó el peruano, Roca Rey, y confió en su técnica para robarle tandas en la puerta de chiqueros de mucho mérito y de una disposición y capacidad al alcance de pocos. Terminó metido entre los pitones estando muy por encima de su oponente. Estocada un poco caída. Dos orejas. 

Cerró la tarde 'Diablito', herrado con el número 127, de 461 kilos de peso. Negro, fino de hechuras, bajito de manos ycorniveleto. Muy complicado al igual que toda la corrida. En los primeros tercios parado en el capote y apretando en banderillas. Otro animal al que costó acoplarse y cogerle las alturas. Soltaba la cara al final de los muletazos. Le planteó Pablo Aguado una faena en la segunda raya del tercio basada en el pitón derecho, de buena colocación y derechazos de bonito trazo y largura. La faena no terminó de coger altura puesto que el toro fue a menos. No había ligazon ni un acople ajustado y algún que otro enganchón.
Estocada trasera y caída. Oreja.