La edición de este año tiene como eje temático principal la formación en emergencias sanitarias, una competencia estratégica y urgente para la profesión
"Con los retos a los que nos enfrentamos, no podemos permitirnos perder el talento del 50% de las personas"
La investigadora Blanca Rojas Andrés reflexiona sobre el papel de las mujeres en la ciencia y los retos a los que se enfrentan en el Día de la Mujer y la Niña en la Ciencia
Como cada 11 de febrero, hoy se celebra el Día de la Mujer y la Niña en la Ciencia con el objetivo de visibilizar el papel de las mujeres investigadoras. Una labor no siempre reconocida a lo largo de la historia pero que está empezando a cambiar, aunque aún queda mucho por hacer.
En este sentido, Blanca Rojas Andrés, investigadora y profesora en la Universidad de Salamanca, reflexiona para TRIBUNA sobre el papel que desempeñan las mujeres en la ciencia y los retos a los que se enfrentan cada día.
- ¿Por qué es necesario celebrar el Día de la Mujer y la Niña en la Ciencia?
Es necesario por muchos motivos. Al igual que en el resto de ámbitos de la sociedad, aún hay mucho camino por recorrer para lograr la igualdad de género en ciencia. El Día de la Mujer y la Niña en la Ciencia pretende visibilizar el trabajo de las mujeres científicas y crear referentes femeninos para las niñas, esas potenciales científicas del futuro. Es fundamental que las niñas tengan referentes femeninos para que crean en sí mismas y se dediquen a la ciencia, si es eso lo que les gusta. Si no hay referentes femeninos o hay pocos, las niñas van a creer que la ciencia no es algo a lo que ellas se puedan dedicar y lo peor de todo es que va a ser algo que van a tener interiorizado de forma inconsciente. Además, para crear una sociedad igualitaria y sostenible es fundamental la participación de las mujeres en ciencia, y no sólo eso, sino la participación de las mujeres en puestos de liderazgo, que es aún muy baja en relación con los hombres. Creo que con los retos a los que nos enfrentamos en el siglo XXI, como el cambio climático, no podemos permitirnos el lujo de perder el talento del 50% de las personas.
- ¿Cuál es la situación actual de la mujer en la ciencia?
Aunque en la actualidad hay muchas mujeres trabajando en ciencia, los puestos de liderazgo (catedráticos, directivos, etc.) siguen estando ocupados en su mayoría por hombres, mientras que las mujeres ocupan puestos más bajos (técnico de laboratorio, profesora titular, etc.). Por otra parte, las condiciones laborales son a menudo precarias en el ámbito científico, y esto es algo que sufren más las mujeres.
- ¿Cuáles son las dificultades a las que se encuentran las mujeres científicas?
Las mujeres científicas nos enfrentamos a varias dificultades. Yo diría que la maternidad y el sesgo de género en las evaluaciones son las principales dificultades. El mundo científico es muy competitivo y la maternidad supone un parón inevitable en la carrera científica de cualquier mujer. En algunas universidades se han empezado a tener en cuenta los parones debidos a las bajas de maternidad a la hora de optar a un puesto de trabajo, para que esto no suponga una desventaja tan grande, pero aún hay muchas universidades que no lo tienen en cuenta y tampoco está claro, en mi opinión, hasta que punto esto compensa la desventaja. Sin duda, el hecho de que la baja de paternidad se haya equiparado a la de maternidad en cuanto a duración (4 meses) y que sea intransferible es algo que ayuda a paliar esta desventaja, siempre y cuando los padres opten por coger esta baja de forma completa y la utilicen para cuidar a sus hijos y no para trabajar y sacar un montón de publicaciones durante este tiempo, lo que sería competencia desleal. Por otra parte, los cuidados siguen recayendo mayoritariamente en las mujeres, y esto es un obstáculo para las mujeres científicas. El ritmo de trabajo en ciencia es muy exigente y sigue adecuado a un modelo antiguo en el cual los científicos eran hombres que no se preocupaban por las tareas domésticas ni por los cuidados. Compatibilizar la vida familiar con un trabajo científico puede ser realmente difícil para las mujeres. Todo esto da como resultado que muchas mujeres científicas que son madres se encuentren en una situación de precariedad laboral, enlazando contratos temporales de 2-3 años, mientras que sus compañeros hombres, aunque tengan hijos, no suelen tener situaciones tan precarias. Por otra parte, existe un sesgo de género a la hora de evaluar un currículum, dependiendo de si se trata de un hombre o una mujer. Esto fue demostrado con un experimento por investigadores de la Universidad de Yale, que comprobaron como dos currículums totalmente equivalentes eran evaluados de forma distinta en función de si el nombre que aparecía era de un hombre o de una mujer, recibiendo el currículum de la mujer peor puntuación.
- ¿Ha evolucionado la situación?
Yo aún soy joven, y creo que me falta cierta perspectiva temporal. Quiero ser optimista y pensar que la situación va mejorando poco a poco, pero aún queda mucho camino por recorrer y se hace de forma muy lenta.
"Es fundamental que las niñas tengan referentes femeninos para que crean en sí mismas y se dediquen a la ciencia, si es eso lo que les gusta".
- ¿Hasta qué punto es más difícil para la mujer visibilizar su trabajo como científica?
En primer lugar, creo que a las mujeres nos cuesta más visibilizar nuestro trabajo porque muchas sufrimos lo que se conoce como 'el síndrome del impostor'. Se trata de una falta de autoconfianza, piensas que no vas a estar a la altura, que tu trabajo no es lo suficientemente bueno... y prefieres quedarte en un segundo plano. Esto está relacionado con la falta de referentes femeninos que produce esa falta de autoconfianza en muchas mujeres científicas. Por otro lado, la falta de referentes femeninos también tiene un impacto en el resto de la sociedad y da como resultado que aparezcan menos mujeres científicas en los medios de comunicación, que se llame a científicos hombres de forma preferente para dar ponencias principales en los congresos, etc. Es la pescadilla que se muerde la cola. Aún no estamos acostumbrados a pensar que las mujeres pueden ser líderes, y te puedes encontrar con situaciones como que alguien se sorprenda porque la jefa de un grupo de investigación es una mujer (más aún si es joven). O como que hay algunas personas den por hecho que el autor de un artículo científico sea un hombre. Aun tenemos que quitarnos muchos prejuicios, todos y todas.
- Un mensaje para las jóvenes y las niñas que sueñan con ser científicas.
Que persigan su sueño, que crean en sí mismas y no se dejen ningunear nunca, y que no se rindan, porque es maravilloso poder dedicarte a aquello que te apasiona.
El organismo municipal cierra 2024 con más de 980.000 trámites y un notable incremento del uso de servicios telemáticos
Durante 2024 el incumplimiento de las normas de prioridad fue el tercer factor más común en los accidentes de tráfico registrados en Salamanca
Un sencillo pero emotivo acto ha servicio para conmemorar la efeméride y renovar su compromiso con la ciudadanía, además de reconocer el trabajo de sus agentes